TEL AVIV.- El Gobierno israelí dijo hoy en una declaración pública que "hará todo lo que sea necesario para defender a sus ciudadanos en las actuales condiciones".
La declaración del Gobierno israelí leída por su secretario, Guidón Saar, al concluir la reunión del gabinete para asuntos de seguridad, en Tel Aviv, señala que "el Gobierno de Israel considera que la ANP y (su Presidente) Yasesr Arafat están implicados en acciones de terror, fomentan el terrorismo e incitan al odio y la violencia (contra Israel)".
Con esta declaración, horas después del ataque que causó al menos 17 muertos y más de 60 heridos el viernes por la noche en Tel Aviv, el Gobierno israelí trata de deslegitimar a la ANP, a Arafat y a sus fuerzas de seguridad, ya que al responsabilizarlos de "terrorismo" las reglas del juego podrían cambiar de forma considerable, dijeron los observadores.
"La ANP ha creado en su territorio una coalición terrorista e intenta ocultarlo con palabras de paz ante la comunidad internacional, mientras su pueblo continúa la incitación y la ola de violencia", se agrega en la declaración oficial.
La prensa local informó de que el "gabinete de seguridad" decidió en su reunión de emergencia una serie de medidas de represalia, entre ellas el bloqueo total de los territorios palestinos, el cierre del aeropuerto y puerto de Gaza, y la prohibición de que Arafat abandone la franja de Gaza.
Sin embargo, estas medidas no han sido confirmadas de forma oficial, como tampoco se ha confirmado oficialmente que el Gobierno haya anulado el alto el fuego unilateral.
La declaración también "emplaza a la comunidad internacional a actuar de forma tal que se aclare (a Arafat) que el terrorismo tiene un precio político, porque la comunidad de naciones no acepta el uso del terrorismo como medio legítimo".
No obstante, dice la declaración leída por Saar, "Israel considera responsable a la ANP del deterioro de la situación (en la región), y sacará sus propias conclusiones políticas y militares de este comportamiento".
