BOGOTA.- Una masiva jornada de protestas contra la política económica del gobierno comenzó este jueves en todo el país con la participación de miles de educadores, profesionales de la salud, obreros y estudiantes.
El paro tiene como principal motivo el rechazo a un proyecto de ley que busca racionalizar las transferencias de fondos que hace el Estado a los departamentos y municipios para gastos de educación, salud e inversión social.
En Bogotá, con profesores y trabajadores de la salud que vinieron desde departamentos alejados de esta capital, la marcha en general fue pacífica.
El profesor Antonio Ruiz dijo a la AP que está viajando desde el domingo desde el sureño departamento de Caquetá para unirse a la marcha ya que considera que esta ley va a crear desempleo entre los maestros y lesionará la educación.
En incidentes menores, algunos jóvenes encapuchados rompieron vidrios de locales comerciales, otros manifestantes se acercaron con palos a la entrada de un edificio, a lo que el portero reaccionó sacando su revólver y apuntando a la multitud, pero sin abrir fuego.
"La reestructuración en la salud es el desmonte de la responsabilidad social del estado", decía uno de los carteles con los que desfilaron los manifestantes.
La protesta fue escoltada por policías antimotines, vehículos lanza agua y aviones que permanentemente sobrevolaban la ciudad.
En otras ciudades del país los manifestantes bloquearon vías principales que comunican con otros municipios, como fue el caso en el Cauca y Valle.
En Bucaramanga, la principal ciudad del oriente colombiano, la policía desalojó a los que intentaban bloquear la vía que conduce a Bogotá. Varios manifestantes y un mayor de la policía resultaron heridos.
La iniciativa promovida por el gobierno del presidente Andrés Pastrana, conocida como la Ley de Transferencias o Acto Legislativo 012, pasó anoche el penúltimo trámite en el Congreso, desatando la ira de sus opositores.
"Estamos protestando contra el Acto Legislativo 012 y también contra otras medidas del gobierno... a nivel de la profundización del modelo neoliberal en el país", dijo a la AP Gloria Inés Ramírez, presidenta de la Federación Colombiana de Educadores y una de las líderes de la protesta.
Ramírez anunció que juntaron más tres millones de firmas para convocar a un referendo que permita revocar la Ley de Transferencias.
Unos 300.000 profesores se encuentran en paro desde el pasado 15 de mayo, por lo cual unos siete millones de estudiantes han dejado de recibir clases. Asimismo, unos 125.000 profesionales de la salud han limitado sus actividades a entregar servicios básicos y de urgencia.
Para la jornada de hoy distintos sectores, como los trabajadores del Poder Judicial y el principal sindicato petrolero la Unión Sindical Obrera (USO), adhirieron a la protesta, que tiene como escenario las principales ciudades del país.
En el caso de Bogotá, el servicio público solo funcionó a media marcha, especialmente en la zona sur de la ciudad.
La Alcaldía Mayor dispuso medidas especiales para prevenir incidentes, entre las cuales se cuentan la ley seca indefinida y la prohibición del porte de armas hasta el lunes.
La polémica Ley de Transferencias busca ahorrarle 4.000 millones de dólares al Fisco en los próximos siete años.
Esta iniciativa legal surge como parte de un compromiso del gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para reducir el déficit fiscal de un 3,6% del Producto Interno Bruto (PIB) en el 2000 a un 2,8% este año.
A cambio del ajuste el FMI ofrece una línea de crédito de 2.700 millones de dólares disponible para usarse si es requerida.
Lo único que falta para que el proyecto se convierta en ley es la aprobación en el plenario de la Cámara de Representantes en el Congreso la próxima semana y que Pastrana estampe su firma.