WASHINGTON.- Un año después de su regreso a Cuba, el niño Elián González está muy bien y no sufrió daño sicológico aparente tras el naufragio al que sobrevivió y la amarga batalla por su custodia, dijo su padre este miércoles.
Juan Miguel González dijo en una entrevista al programa Today de la cadena de televisión estadounidense NBC que la vida de su familia ha vuelto a la normalidad tras lograr que los parientes en Miami del pequeño se lo devolvieran.
Elián, quien ahora tiene 7 años, sobrevivió a un naufragio en el estrecho de la Florida en noviembre de 1999, en el que pereció su madre y otras 10 personas que pretendían emigrar ilegalmente a Estados Unidos. "Me siento bien y mi familia está muy contenta. Un año después de todos estos acontecimientos la vida de toda la familia ha vuelto a la normalidad y todo ha retomado su curso normal", dijo González en la entrevista desde Cuba, un día antes que se cumpla el primer aniversario del regreso del niño a la isla caribeña.
NBC mostró imágenes de Elián sonriente y jugando con sus amigos en una escuela en Cuba, donde el pequeño es considerado un héroe nacional. El niño fue encontrado en alta mar aferrado a la cámara de un neumático frente a las costas de Fort Lauderdale, Florida, el 25 de noviembre de 1999, tras el naufragio de la embarcación en la que viajaban los migrantes ilegales que pretendían llegar a Estados Unidos.
Fue entregado inicialmente por las autoridades de migración a parientes en Miami, que se negaron a entregarlo a su padre en Cuba, como luego ordenó la justicia, diciendo que Elián sería utilizado como un instrumento político por parte del gobernante cubano Fidel Castro.
El caso en la Corte Suprema
La batalla legal entre Juan Miguel González y sus parientes en Miami por la custodia de Elián llegó hasta la Corte Suprema de Justicia antes de que el pequeño pudiera regresar a Cuba. La situación del niño cautivó el corazón de la gente en todo el mundo, aunque la imagen más recordada es la del chico llorando y gritando cuando fuerzas federales estadounidenses lo sacaban a la fuerza de la casa de sus parientes en Miami.
Posteriormente, Elián fue trasladado a Washington donde se reunió con su padre, su madrastra, y su medio hermano, en una base militar de Estados Unidos. Hace dos semanas, nació otro medio hermano de Elián.
González dijo a NBC que no se arrepiente de su decisión de haber llevado de regreso a Elián a Cuba, o de la manera en que el pequeño fue sacado de la residencia de sus parientes en Miami. El niño no ha sufrido trauma sicológico alguno, dijo el padre. "Nunca hubo necesidad de que lo viera un sicólogo porque desde el comienzo cuando yo lo vi en Washington, para mi era el mismo Elián de siempre. Es el mismo niño de siempre, igual de expresivo", añadió.
Al referirse a la reunión con su hijo, González dijo a NBC que había sufrido un colapso por la emoción cuando lo vio y que lo tuvieron que ayudar a ponerse en pie. Uno de sus mayores preocupaciones como padre, dijo González, era no sobreproteger a Elián. El niño, dijo, no tenía miedo al agua pese a haber perdido a su madre cuando la embarcación en que viajaban se hundió.
Los medios de comunicación asediaron al pequeño durante la batalla legal y González dijo que Elián sólo temía a las cámaras de televisión.