BAGDAD.- El vicepresidente iraquí, Taha Yasin Ramadán, reiteró hoy que Bagdad rechazará cualquier propuesta que se presente en el Consejo de Seguridad de la ONU en relación con la cuestión iraquí que no incluya el levantamiento de las sanciones impuestas a este país desde 1990.
Ramadán insistió en que su país no acepta el plan británico, apoyado por EE.UU., de sustituir el embargo impuesto a Irak por "sanciones selectivas".
Según Londres, la propuesta pretende flexibilizar la importación por Irak de productos básicos y, al mismo tiempo, controlar aún más los que pueden ser empleados para el desarrollo de las capacidades militares iraquíes.
"Estudiaremos los futuros proyectos en el Consejo de Seguridad, y anunciaremos nuestra opinión, pero no trataremos de forma positiva cualquier plan que no incluya el levantamiento del embargo", dijo el Ramadán en declaraciones a los periodistas en Bagdad.
Irak suspendió sus exportaciones de petróleo el 4 de este mes en protesta por la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU de prolongar el programa "petróleo por alimentos" durante un mes, en lugar de seis, con el fin de discutir una revisión global de las sanciones.
En virtud de "petróleo por alimentos", firmado por Bagdad y las Naciones Unidas en 1996, la ONU permite a Irak exportar cantidades de crudo cada semestre para importar productos de primera necesidad.
En las conversaciones mantenidas en los últimos días en el Consejo de Seguridad, Rusía, que tiene derecho a veto, ha afirmado que no permitirá la aprobación del proyecto presentado por Londres y apoyado por Washington.