OTTAWA.- Los canadienses que padezcan enfermedades crónicas, como el sida o cáncer, tendrán que llevar un carné de identidad, con su foto, expedido por el Gobierno para demostrar que pueden consumir legalmente la marihuana, informaron fuentes oficiales.
Los responsables del Ministerio de Salud canadiense dijeron que después de que se emitan las primeras cédulas de identidad, a partir del 30 de julio, no habrá otra manera legal para autorizar la compra de la hierba a los enfermos.
Pero es probable que el próximo año exista una plantación de marihuana autorizada por el gobierno en Saskatoon, dijo la doctora Jody Gomber, directora general de sustancias controladas del departamento de Salud. Gomber dijo en conferencia de prensa que una vez que empiece la producción, se harán los arreglos necesarios para facilitar a los usuarios autorizados obtener semillas de marihuana de la plantación de Saskatoon, para que ellos mismos cultiven la hierba para su uso personal.
A cambio, los pacientes tendrían que compartir información con los científicos canadienses, para apoyar investigaciones, agregó. En algunos casos, el paciente autorizado al consumo de marihuana podrá designar a un amigo cercano o a un familiar para que este cultive la planta. Este "cultivador" también tendrá que tener un carné con foto para mostrarlo a la policía si hay amenaza de arresto.
Gomber insistió en que nadie tendrá derecho a vender la sustancia comercialmente y que la producción comercial o la venta seguirá siendo un delito.
La cédula de identificación autoriza al portador a consumir o cultivar marihuana y se expedirá sólo cuando las autoridades reciban un certificado firmado por un especialista recomendando el uso de esta droga para algunos pacientes.
La Asociación de Médicos Canadienses, que agrupa a todos los doctores en el país, se opone al plan. "Siguen existiendo vacíos acerca de la evidencias científicas comprobables sobre los beneficios médicos de la marihuana, sobre los efectos conocidos y desconocidos de su uso cuando se fuma y las implicaciones de un suministro no regulado en la calidad, consistencia y contaminación de la droga", dijo la entidad en un comunicado.
Las regulaciones publicadas el miércoles permiten el uso de la marihuana con fines médicos para cualquiera que tenga una enfermedad terminal, cuya esperanza de vida es menos de 12 meses, pacientes que sufren de enfermedades crónicas específicas, como el sida, el cáncer, artritis muy severa, daños en la espina dorsal o esclerosis múltiple .