BOGOTA.- Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) afirmaron en un comunicado que no proseguirán liberando soldados y policías que mantienen en su poder.
A fines de junio, las FARC entregaron 305 uniformados que habían capturado en retenes ilegales, asaltos a cuarteles y tomas de poblados. La acción fue definida como un "gesto de paz" por parte de los rebeldes.
También a principios de mes habían liberado otros 59 policías y soldados, como parte de un acuerdo humanitario firmado con el Gobierno del Presidente Andrés Pastrana, que también contempló la excarcelación de 14 guerrilleros enfermos.
Ahora, las FARC proponen al Gobierno aprobar una "Ley de Canje" para proseguir con el intercambio de prisioneros de ambas partes.
En manos de los rebeldes permanecen aún 47 oficiales y suboficiales, y en las cárceles hay centenares de presos de la guerrilla más poderosa del país.
"Seguir exigiendo a las FARC más gestos unilaterales, sin que el Estado haga lo propio no corresponde a la realidad de la confrontación colombiana", dice el comunicado de la guerrilla, divulgado el sábado desde la zona de distensión en el sur del país.
Las autoridades han considerado inviable el "canje". Los argumentos apuntan a la dificultad que implica homologar a rebeldes presos por delitos con policías y soldados que fueron secuestrados cuando cumplían con su deber.
Las FARC y el Gobierno de Pastrana realizan desde hace dos años, y medio un proceso de paz que ha arrojado como único acuerdo concreto el intercambio humanitario, tema ajeno a la agenda de negociación.