MADRID.- Una bomba estalló el sábado en una población de la provincia de Navarra y mató a un político local, de lo que se responsabilizó a la organización terrorista separatista vasca ETA.
El atentado ocurrió en Leiza, un pueblo de 3.000 habitantes ubicado a 30 kilómetros al noroeste de la capital provincial navarra, Pamplona, donde se celebraba la corrida final de toros de la fiesta de San Fermín.
El gobierno regional de Navarra, limítrofe con el país vasco, identificó a la víctima como José Javier Múgica, de 50 años, concejal de la Unión el Pueblo de Navarra, un partido centroderechista opuesto al separatismo vasco.
El nuevo presidente de la región vasca Juan José Ibarretxe, que juramentó por segunda vez su cargo este sábado en la ciudad de Guernica, condenó el ataque y expresó sus profundas condolencias por las atrocidades cometidas por ETA.
El ministro del Interior Mariano Rajoy viajó a Leiza desde Madrid para expresar sus condolencias a la familia de Múgica, quien era casado y tenía tres hijos.
La bomba que mató a Múgica, que también era fotógrafo, fue adosaba a la parte inferior de su furgoneta y estalló cuando la víctima puso en marcha el motor, antes de las 10 de la mañana (0800 GMT), según las versiones periodísticas.
Una minoría de los habitantes de Navarra hablan vascuence y la provincia es reclamada por la ETA como parte del país independiente que quiere construir. El concejo de Leiza es dominado por el ala política de la ETA.
Mugica había sido víctima de varias acciones de hostigamiento. Otra furgoneta fue incendiada en agosto pasado. Además pintaron leyendas amenazantes en su casa, su estudio fotográfico y la sede de su partido político, informó la agencia Europa Press.
A pesar de estos hechos, Múgica había rechazado las exigencias de que renunciara.
Múgica había dicho a la prensa que cada vez que le hacían algo semejante, sólo lograban fortalecerlo.
ETA normalmente toma semanas para adjudicarse la responsabilidad de atentados y con frecuencia lo hace a través de comunicados en diarios proindependentistas vascos.
"Una vez más, la ETA se hace oír con el único método que conoce, con el asesinato y la desconsideración por los derechos humanos", dijo una declaración del Partido Nacionalista Vasco, que gobierna la región vasca en coalición con una coalición marxista.
