SEUL.- El número de muertes en Corea del Sur por las más fuertes lluvias caídas en el país en 37 años se elevó el lunes a 45, mientras brigadas de rescate buscaban víctimas entre los escombros que dejó la tormenta.
La lluvia, que cayó con mayor intensidad en la zona de la capital Seúl, fue posterior a meses de una sequía sin precedentes y provocó inundaciones y deslaves.
Funcionarios de ayuda para desastres dijeron que 45 personas habían muerto y nueve se encontraban desaparecidas después que más de 300 mm de agua cayeron en dos días.
La mayoría de las víctimas murió electrocutadas por el derribo de cables de energía eléctrica mientras que otros se ahogaron en sus propias casas o murieron cuando cuando sus viviendas fueron arrasadas por deslaves.
El Centro Nacional para Prevención de Desastres y Medidas de Ayuda dijo que todavía se evaluaban los daños sufridos por las propiedades arrasadas por la tormenta.
Las lluvias cayeron sobre Corea del Sur después de la peor sequía de que se tenga registro, durante la cual más de 100.000 soldados fueron desplazados para abastecer de agua a las fincas y ayudar a trasplantar la siembra de arroz.
Millares de personas fueron evacuadas de viviendas inundadas en el sur del país y centenares fueron trasladadas a zonas menos peligrosas. Más de 30.000 casas e la capital y áreas vecinas quedaron inundadas, dijo el centro de Prevención de Desastres.
Unos 3.000 soldados ayudaban a localizar a los desaparecidos y a retirar árboles y postes de electricidad de las carreteras, así como a más de 450 vehículos que resultaron dañados por las lluvias. Miles de funcionarios públicos y policías fueron también llamados a colaborar con los damnificados.
