BRUSELAS.- La Comisión Europea sancionó hoy a las compañías aéreas SAS y Air Maersk con multas de más de 39 y 13 millones de euros, respectivamente, por haber llegado a un acuerdo para compartir mercados e infringir así la normativa comunitaria.
Según la Comisión, que multó con 39,3 millones de euros a SAS y con 13,1 millones de euros a Air Maersk, "el acuerdo secreto entre ambas compañías para operar ha conducido a la monopolización por SAS de la ruta Copenhague-Estocolmo, en detrimento de más de un millón de pasajeros que hacen ese itinerario cada año, así como al reparto de otras rutas hacia y desde Dinamarca".
Actualmente, Air Maersk ha dejado de operar en la línea entre Copenhague y Estocolmo, con lo que permite que SAS domine mayoritariamente la que está considerada como la principal ruta escandinava.
La Comisión considera que este comportamiento "conlleva el riesgo de un incremento de los precios para el millón de pasajeros que vuelan cada año de una ciudad a otra".
El Ejecutivo comunitario decidió el 2 de febrero enviar un pliego de cargos a las compañías después de que ambas solicitasen en 1999 que se les autorizase un acuerdo de cooperación.
Después de examinar esta notificación y tras las inspecciones realizadas en junio de 2000 en la sede de SAS, Air Maersk y A.P.Moller, filial de Maersk, el Ejecutivo comunitario consideró que el alcance de la cooperación era mayor de lo que habían notificado las compañías.
La Comisión obtuvo pruebas que demostraban que SAS y Air Maersk habían alcanzado acuerdos específicos de reparto del mercado sobre rutas internacionales concretas.
Así, Maersk dejó de volar entre Copenhague y Estocolmo a partir de marzo de 1999, una ruta en la que hasta entonces había competido con SAS.
Como compensación, SAS dejó de cubrir la ruta entre Copenhague y Venecia y entre Billund y Francfort.
La Comisión ya anunció entonces que tenía intención de multar a las compañías, puesto que "las infracciones son especialmente relevantes para los consumidores, que en algunas rutas importantes ya no pueden elegir entre las dos líneas aéreas como consecuencia de estos acuerdos".
SAS (Scandinavian Airlines System) es un consorcio controlado en parte por los gobiernos sueco, danés y noruego, y Maersk es una compañía danesa controlada por el grupo A.P.Moller.
Ambas son las principales compañías que realizan vuelos con salida y destino a Dinamarca, donde se ha centrado la investigación de la Comisión.
La Comisión considera que "este acuerdo secreto entre SAS y Maersk Air es una infracción muy grave del derecho comunitario de la competencia y causa enormes perjuicios a los pasajeros escandinavos dejándoles una elección limitada o nula y haciéndoles pagar tarifas potencialmente elevadas", según indicó hoy en un comunicado.
Además, el Ejecutivo comunitario señala que las compañías "eran conscientes del carácter ilícito de su acuerdo, ya que trataron de ocultarlo deliberadamente".
Para el establecimiento de las sanciones, la Comisión ha tenido en cuenta la diferencia de tamaño de las compañías, que el acuerdo conlleva un refuerzo del poder de mercado de SAS, la necesidad de fijar multas con un nivel disuasorio y el nivel de la cooperación de las partes con la Comisión después de las inspecciones.