SAN SALVADOR.- Un dirigente de la guerrilla colombiana afirmó hoy en San Salvador que el Plan Colombia, que apoya Estados Unidos, ''es un plan de guerra contrarrevolucionario'' y no un instrumento para acabar con el cultivo y el tráfico de drogas, como se asegura.
Arturo Campos, miembro del ''Estado Mayor Central'' y de la Comisión Internacional de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), declaró que ''nuestra postura ha sido vertical, nunca hemos dudado en catalogarlo como un plan de guerra que comienza contra las FARC, contra la insurgencia, contra nuestro pueblo en su primera etapa''.
Campos se encuentra en San Salvador desde el viernes pasado para participar en el Primer Encuentro Internacional de Solidaridad y por la Paz en Colombia y América Latina, que concluyó el domingo y en el que participaron académicos y políticos de izquierda de una veintena de países.
En declaraciones a la radio local RCS, Campos afirmó que el Plan Colombia ''tiene una punta de lanza que va más allá (de su país), está de por medio la revolución bolivariana de Venezuela, donde el presidente Hugo Chávez viene haciendo una cantidad de reformas''.
Sostuvo que Estados Unidos ''necesita hacer reposiciones de carácter estratégico militar'' en América Latina, sobre todo en países como Colombia que ''es rico, tenemos grandes reservas de petróleo, oro, níquel, cobalto, carbón, costas en dos océanos, somos la cuarta potencia hídrica del mundo, tenemos la mayor biodiversidad''.
El dirigente guerrillero señaló que en Colombia ''nos tienen cercados con bases militares por todos lados'', entre las que mencionó las de Aruba y Curazao; Comalapa, en El Salvador, y Palmarola, en Honduras.
Campos agregó que esta situación es ''un cordón militar estratégico apuntando a una intervención en Colombia, ninguna lucha contra el narcotráfico''.
Señaló que en el Caribe, el Pacífico y la Amazonía ''no hay lugar, ni un milímetro'' que no esté controlado por radares de Estados Unidos.
Añadió que debido a esa situación, ''por esa área no podría pasar ni una aguja y, sin embargo, salen de Colombia toneladas de coca y llegan, además, barcos con contenedores con químicos, y producen la droga dentro de Estados Unidos. El Plan Colombia es una guerra contrarrevolucionaria''.
Campos agradeció al Gobierno salvadoreño ''la prudencia que ha tenido'' con la delegación de las FARC que participó en el foro, ya que ''no hemos tenido ningún hostigamiento por parte de los servicios de inteligencia nacionales''.
Sin embargo, denunció que Estados Unidos ''seguramente cree que esto (El Salvador) es una hacienda o una finca y trató de impedir por todos los medios la realización del encuentro''.