LONDRES.- La propuesta para la creación de un "santuario de ballenas" en el sur del Pacífico no prosperó hoy al no conseguirse los votos necesarios en la Comisión Ballenera Internacional (CBI).
Durante la asamblea anual de la CBI, que se celebra en Londres, un total de 20 países miembros de dicha organización respaldaron la propuesta, presentada por los gobiernos de Australia y Nueva Zelanda, mientras que 13 votaron en contra y cuatro se abstuvieron.
La propuesta no se pudo adoptar ya que las normas de la Comisión Ballenera Internacional requieren el respaldo de las tres cuartas partes de los países miembros para su aprobación, lo que no se alcanzó en esta votación.
Japón y Noruega, como países pescadores de ballenas, encabezaron el bloque de naciones opuestas a la iniciativa.
"Esto no fue una votación, fue una subasta, y Japón hizo la mayor apuesta", declaró el representante del International Fund for Animal (IFAW), Mick McIntyre, quien acusó al país nipón de comprar votos en contra.
Además, Japón ofreció ayudas a los países que no apoyaran la propuesta, según se quejó el delegado de IFAW.
El resultado de la votación "es una bofetada para los pequeños países islas del sur del Pacífico, muchos de los cuales no están representados aquí", dijo McIntyre.
"El hecho de que Japón haya comprado los votos de tantos países en desarrollo, algunos de los cuales son naciones islas, es un duro golpe para el sur del Pacífico y tiene graves consecuencias para el futuro de la protección de ballenas", declaró el representante de Greenpeace en Fiji, Pio Manoa.
La reunión de la CBI, organismo integrado por más de 40 países, analiza en este encuentro, que comenzó ayer y terminará el viernes, la situación de estos cetáceos.
La propuesta de crear un santuario de ballenas en el sur del Pacífico era uno de los puntos más importantes de esta reunión, seguida muy de cerca por los grupos ecologistas.
Los verdes piden a todos los países que no cedan a las presiones de Noruega y Japón, que se muestran opuestos a la actual prohibición de matanza de ballenas con fines comerciales.