JERUSALEN.- Un tribunal militar palestino sentenció a muerte a un hombre palestino de 50 años por colaborar con Israel para eliminar a los extremistas que atentan contra el estado judío.
Ahmed Abu Issah reconoció que facilitó a los israelíes información sobre los desplazamientos de Salah Darwazeh, muerto el 25 de julio cuando su vehículo fue alcanzado por cohetes israelíes en la aldea cisjordana de Naplusa.
"Soy culpable y pido clemencia al tribunal", dijo a los jueces Issah, un bracero que tiene nueve hijos. Los israelíes le pagaron 200 shekels (unos 45 dólares) cada vez que facilitó información sobre los desplazamientos de Darwazeh, agregó.
Pese al ruego de Issah, los tres jueces lo condenaron a la pena capital tras una audiencia de 90 minutos. Los espectadores que llenaron la sala y unas 2.000 personas congregadas en la calle pidieron con voz al cuello: "¡Ejecución, ejecución!".
Los palestinos dijeron que los colaboradores han desempeñado un papel clave en los ataques de Israel contra los extremistas palestinos. Unos 50 palestinos han muerto en esos ataques desde que estalló la violencia callejera el año pasado, según fuentes palestinas.
Dos presuntos colaboradores palestinos fueron abatidos a tiros la noche del miércoles en Cisjordania, uno en Ramala y el otro cerca de Belén. En un volante distribuido el jueves en Belén, un grupo militante afiliado con el movimiento Al Fatah de Yasser Arafat se atribuyó ambos homicidios. "Queremos advertir al resto de los espías que les llegará pronto su turno con las balas de la justicia", dijo en el volante la Brigada de los Mártires de Al Aqsa. "Nunca olvidaremos la sangre de los mártires inocentes que vendisteis a precio barato", agregaba la nota.
Otro presunto colaborador, un hombre de 57 años de Beit Sahour, cerca de Belén, fue abatido el martes, dijeron fuentes de seguridad palestinas. Además, cinco palestinos fueron acusados el martes de ayudar a las fuerzas especiales israelíes a matar el 31 de diciembre a Thabet Thabet, el líder local de la facción Al Fatah en la aldea cisjordana de Tulkarem. Los tres fueron condenados a morir fusilados, un cuarto fue sentenciado a una pena carcelaria y un quinto quedó libre.
Estados Unidos se opone a la eliminación sistemática de los extremistas palestinos y la Unión Europea consideró este jueves esos homicidios una violación del derecho internacional que "sólo puede conducir a nuevas escaladas" de violencia.
Los líderes israelíes han defendido la medida pese a las condenas casi universales, por considerar que los líderes del grupo extremista Hamas han atentado repetidamente contra la población civil israelí y preparan nuevos ataques.
Mientras tanto, los líderes palestinos criticaron a Estados Unidos por considerar que debería presionar más a Israel para que haga concesiones. "Estados Unidos ha demostrado su incapacidad para contener la crisis y poner fin a la ag|resión israelí contra el pueblo palestino", dijo Ahmed Qureia, presidente del parlamento palestino y uno de los negociadores de Arafat.
