LONDRES.- Carlos de Inglaterra ingresó hoy en un hospital de la ciudad de Cirencester, al suroeste de Gran Bretaña, tras caer de su caballo mientras disputaba un partido benéfico de polo, confirmó el palacio de San Jaime, su residencia oficial.
"Podemos confirmar que el príncipe de Gales ha sido conducido a un hospital para ser atendido de una herida causada durante un encuentro celebrado en el club de polo Cirencester Park", señaló dicha fuente que añadió que se trata de una "herida leve".
Según el palacio de San Jaime, el príncipe, de 52 años, cayó del caballo "de forma violenta", sufrió "pérdida de consciencia temporal" y fue evacuado por una ambulancia "como medida de precaución".
Pese a la aparatosa caída, el heredero al trono británico "no se ha fracturado ningún hueso", aseguró su residencia oficial.
Carlos disputaba el partido acompañado por sus dos hijos, los príncipes Guillermo y Enrique, quienes tienen previsto visitar a su padre esta misma noche.
Por su parte, el palacio de Buckingham ha confirmado que la reina Isabel II de Inglaterra ha sido informada del accidente de su hijo.
La citada fuente añadió que Carlos espera recuperarse rápidamente para asistir a la fiesta que su abuela materna, la Reina Madre -también hospitalizada esta semana debido a una anemia-, celebrará este sábado con motivo de su centésimo primer cumpleaños.
No es la primera vez que el príncipe de Gales sufre este tipo de sobresaltos, ya que el pasado enero se partió un hueso de un hombro al caer de un caballo mientras practicaba la caza del zorro y en 1990 se rompió el brazo derecho en otro partido de polo.
