SKOPJE.- La OTAN está dispuesta a enviar a Macedonia unos 3.500 soldados para surpervisar el desarme de los rebeldes albaneses del UCK-M si se logra un acuerdo de paz y si los rebeldes aceptan deponer las armas, declaró este lunes un portavoz de la Alianza Atlántica, Barry Johnson, en la capital macedonia, Skopje.
Los primeros soldados de la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) podrán ser desplegados en el lugar en las 48 horas siguientes a la conclusión de un acuerdo de paz, afirmó este portavoz.
Un acuerdo político global entre los partidos macedonios y albaneses debería lograrse antes del martes en Ohrid, pero el proceso de regreso a la paz sigue siendo frágil y tomará tiempo, según los mediadores.
La actitud de la guerrilla, que ha permanecido silenciosa estos últimos días, es todavía un aspecto imprevisible del proceso de paz. "Un acuerdo no significará que todo ha terminado, porque la tensión es aún muy intensa y los enfrentamientos siguen, por desgracia", subrayó el mediador europeo, el francés François Léotard.
Del lado albanés, un experto de la delegación del "Partido de la Democracia y de la Prosperidad" (PDP) indicó que el hecho de "concluir un acuerdo sobre el asunto de la policía significa que estamos en el camino correcto para llegar a un acuerdo global".
"Dos o tres puntos restan aún por arreglar", según fuentes occidentales informadas de la negociación. Las delegaciones macedonias desean crear un mecanismo que preserve los intereses de los macedonios donde sean minoritarios, o sea en el norte y el oeste, a lo largo de las fronteras con Kosovo y Albania.
En general, el proyecto de acuerdo-marco garantiza la existencia de un Estado unitario de Macedonia a cambio de una amplia autonomía para las colectividades locales.
El mismo mejora la situación de los albaneses, cuya lengua será oficialmente reconocida en el Parlamento y en las zonas albanófonas y que tendrán un papel creciente en la policía y en el Estado.
