GAZA.- Los palestinos prometieron el viernes intensificar su levantamiento de 10 meses contra la ocupación israelí para "liberar" sus sedes principales en Jerusalén, ocupadas por la policía de Israel tras un atentado suicida palestino.
Asimismo, condenaron un ataque con misiles israelí que destruyó un puesto de la policía palestina en las afueras de la ciudad cisjordana de Ramallah.
"Esta es una (acción) muy peligrosa contra el pueblo palestino y una escalada" del conflicto, dijo a los periodistas el presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, mientras inspeccionaba la estación policial destruida.
"Pero todo el mundo debería saber que los palestinos somos los más fuertes y más fieles en este conflicto", agregó, caminando entre los escombros.
Los palestinos reaccionaron alarmados a la ocupación israelí de la sede de la Organización para la Liberación de Palestina en Jerusalén Oriental, llamada la Casa de Oriente, y de otras nueve oficinas.
La medida fue en respuesta a un atentado suicida palestino perpetrado el jueves en Jerusalén Occidental que dejó 16 muertos, entre ellos el atacante, y que Israel calificó de una intensificación del conflicto.
Ahmed Abdel Rahman, un asistente de Arafat de alto rango, dijo que la medida israelí viola un acuerdo de paz interino de 1993 e inflama el conflicto en torno a la Ciudad Santa, que ambas partes reclaman como su capital. "La ocupación israelí de la Casa de Oriente pretende destruir todos los acuerdos firmados desde 1993", dijo Abdel Rahman. "El pueblo palestino se ha quedado sin otra opción que la de escalar la resistencia y la intifada (levantamiento) para liberar a la Sagrada Jerusalén y recuperar la Casa de Oriente y todas las otras instituciones palestinas", agregó.
Israel capturó Jerusalén Oriental en la Guerra del Oriente Medio de 1967 y se la anexó en una medida que no ha sido reconocida internacionalmente. El estado judío considera a toda la ciudad como su capital eterna e indivisible.
Los palestinos quieren que la parte oriental de la ciudad se la capital de un futuro estado y la Casa de Oriente ha servido como su centro municipal y simbólico.
Además, ha sido la sede del equipo de negociadores palestinos para las conversaciones de paz con Israel.