GINEBRA.- La situación en el norte de Macedonia sigue siendo muy tensa una semana después de la firma del acuerdo de paz, afirmó hoy, martes, un portavoz de la Alta Comisaría de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Kris Janowski.
La inseguridad y la desconfianza no permiten aún a esta organización iniciar la repatriación de los refugiados y además pequeños grupos de ciudadanos macedonios continúan huyendo de la ciudad de Tetovo debido a los intermitentes intercambios de fuego de mortero que se producen desde el fin de semana.
En Skopje varios cientos de personas han construido una barrera en la carretera que lleva a Blace, la frontera con Kosovo, para evitar el regreso de los refugiados.
Más de 27.000 refugiados han regresado a Kosovo por esta carretera pero los últimos incidentes han hecho que no haya habido más movimientos en los tres últimos días, agregó Janowski.
Por otro lado, macedonios desplazados en un centro colectivo de Kumanovo han expresado su deseo de volver a sus casas a condición de que se garantice su seguridad.
Mientras, en Aracinovo la situación se está normalizando y ya han regresado alrededor de 8.000 de sus habitantes, que habían huido por los fuertes combates del mes de junio, la mayoría macedonios y sólo unos pocos albaneses.
Según los datos de ACNUR, unas 60.000 personas están aún desplazados en Macedonia y más de 50.000 en Kosovo y es esencial que se garantice la seguridad para que puedan regresar a sus casas, así como para la aplicación del acuerdo de paz.