BOGOTA.- Cerca de 6.000 militares combatían este miércoles contra una gruesa columna de la guerrilla de las FARC en una zona selvática y cocalera del sureste de Colombia, escenario desde la semana pasada de una gigantesca ofensiva contrainsurgente, informó el jefe de las Fuerzas Armadas, el general Fernando Tapias.
El oficial señaló en Bogotá que 1.200 soldados de la Brigada Móvil número uno, que habitualmente operan en el noroeste del país, reforzaron este miércoles a los 4.800 efectivos de un comando especial del ejército que han tendido un cerco a unos 2.000 rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas).
Los altos mandos castrenses afirman que las tropas -que se movilizana en helicópteros artillados y aviones de combate provistos de sistemas de visión nocturna- han causado numerosas bajas al grupo insurgente, pero no han precisado cuántas.
Entre los rebeldes abatidos se halla Octavio Salamanca (alias 'Urías Cuéllar'), el jefe de la columna 'Juan José Rondón', una de las unidades especiales de combate de las FARC (16.500 combatientes en todo el país), según el Ejército.
Tapias señaló este miércoles que los soldados han distribuido miles de volantes en la zona de los combates -comprendida entre los departamentos de Meta, Guaviare, Guainía y Vichada- invitando a los guerrilleros a desertar de las FARC, grupo comprometido desde enero de 1999 en una conversación de paz con el gobierno.
"Les hemos mandado miles de volantes para invitarlos a que abandonen las filas guerrilleras y decirles que aquí los recibiremos y les ayudaremos en su proceso de reinserción, que les daremos todo el apoyo que necesiten, tanto médico como legal", afirmó el oficial.
El comandante militar añadió que los comunicados han sido lanzados desde el aire por los efectivos de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) que participan en la operación, y que en la última semana han bombardeado estratégicas posiciones rebeldes en la selva.
Tapias indicó que las Fuerzas Militares le están ofreciendo a los guerrilleros las garantías necesarias para que se reincorporen a la vida civil, incluyendo asesoría jurídica. "Las personas que están allí también son colombianos. Sabemos que muchos de ellos han sido reclutados bajo engaños o amenazas de muerte, incluso contra sus familiares", subrayó el jefe militar.
El general advirtió, no obstante, que las tropas mantendrán su ofensiva contra los rebeldes.
El Presidente colombiano, Andrés Pastrana, advirtió este miércoles en una ceremonia militar en Bogotá que los militares seguirán combatiendo sin pausa a las FARC y al guevarista Ejército de Liberación Nacional (ELN, 4.500 efectivos) hasta que estos grupos guerrilleros accedan a dialogar por la paz en un entorno de cese al fuego y hostilidades.
Un comando de las FARC irrumpió en la madrugada del miércoles en la localidad de San Juan de Arama, en Meta, y destruyó con explosivos 20 viviendas, varias oficinas gubernamentales, el templo católico y un jardín infantil, aunque no causó víctimas fatales, según las autoridades.