BUENOS AIRES.- Los recortes decididos por el gobierno para terminar con el déficit estatal llegaron el jueves a una oficina policial que tuvo que suspender la entrega de por lo menos 68.000 pasaportes por falta de dinero para pagar a la empresa proveedora.
Un centenar de personas se agolpó frente a las oficinas donde se entregan los nuevos pasaportes para reclamar por la demora, pero el comisario Francisco D'Angelo dijo que nada podía hacer para superar la situación.
Mientras dure la emergencia, dijo, sólo se entregarán los pocos pasaportes disponibles a personas que deban viajar para realizarse operaciones quirúrgicas o tratamientos médicos impostergables.
El funcionario, encargado de la oficina de Antecedentes de la policía, dijo que los 75 dólares que se pagan para la renovación del documento son depositados automáticamente en una cuenta del Banco Nación, pero el ministerio de Economía no hace el giro correspondiente a la empresa que entrega los insumos.
D'Angelo dijo que la deuda con la empresa es de 14 millones de dólares.
"El ministerio de Economía tendrá prioridades que le serán más o menos acuciantes", añadió en alusión a la decisión gubernamental de recortar los gastos y postergar también los pagos a proveedores.
Roberto Molina, director de Ciccone Calcográfica, la empresa proveedora dijo a una radioemisora que la situación es "insostenible" y que por tal motivo decidieron cortar la entrega de pasaportes.
"No podemos aguantar más, porque también nosotros tenemos que pagarle a nuestros proveedores, llega un momento en que la cadena se va cortando y por consiguiente no podemos fabricar y entregar", dijo Molina.