ISLA DE NAVIDAD.- Todos los inmigrantes que se encontraban a bordo de un carguero noruego frente a las costas de la australiana Isla de Navidad se preparaban para partir el martes rumbo a un destino incierto.
Los inmigrantes fueron trasladados el lunes del barco de carga de bandera noruega a un buque de la armada, tras una semana de estancamiento diplomático, y tenía previsto partir rumbo a Papua Nueva Guinea.
Sin embargo, un caso judicial podría aún obligar al gobierno a tomar una decisión que ha evitado a toda costa: que la mayor parte de los refugiados afganos pueda desembarcar en Australia.
Cuatro traductores debían abordar el martes el buque HMAS Manoora antes que zarpe hacia Puerto Moresby, capital de Papua Nueva Guinea.
Desde allí, los inmigrantes serán trasladados a Nueva Zelanda o a la pequeña isla del Pacífico de Nauru, donde se procesarán sus peticiones de asilo.
Los inmigrantes en busca de asilo han permanecido frente a la Isla de Navidad desde que fueron rescatados el 26 de agosto por el Tampa, embarcación de bandera noruega. Indonesia y Australia se han negado a aceptarlos.
Sin embargo, la desocupación del carguero noruego y el viaje de los inmigrantes hacia Papua Nueva Guinea no marca el fin de la crisis.
Un acuerdo judicial entre Australia y abogados de los derechos civiles establece que los inmigrantes no podían ser obligadas a dejar el Manoora hasta que un tribunal decida si la negativa de Australia a admitir a los refugiados es legal.
Bajo el acuerdo, el gobierno también dijo que devolvería a los inmigrantes a Australia si perdía el caso y el Tribunal Federal en Melbourne ordena su regreso.
Pero ante la posible apelación por parte del gobierno en caso de que se falle en su contra, el futuro inmediato de los refugiados y su destino final seguía siendo incierto.
El juez del Tribunal Federal Tony North dijo que esperaba dictar su fallo antes de que el Manoora llegue a Puerto Moresby, en un período de seis a 10 días. El caso fue aplazado hasta las 10.15 hora local (0015 GMT) del martes y no se espera una decisión hasta el miércoles.
Australia ha mantenido su negativa a aceptar a los inmigrantes argumentando que el asunto era responsabilidad de Indonesia, lugar desde el que partieron. Yakarta también ha rechazado acogerlos.
El domingo, Australia anunció una solución con Nauru, que aceptaba acoger a 283 y con Nueva Zelanda que acogía a 150. Australia se hará cargo del coste del proceso relacionado con las personas a bordo.
Funcionarios australianos han llegado a Nauru, una isla de sólo 12.000 habitantes, para preparar el arribo de los inmigrantes que se instalarán en tiendas.
Nauru dijo que podría tardar tres meses en resolver las peticiones de asilo de los inmigrantes. Los refugiados legitimados podrán entonces solicitar residencia en otro país, incluido Australia. Nueva Zelanda acogerá a los inmigrantes en un centro de refugiados en Auckland.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, había manifestado anteriormente que el plan de llevar a los inmigrantes a Nueva Zelanda y Nauru le parecía aceptable.