EMOLTV

EE.UU. presiona a Pakistán para que colabore

La embajadora de EE.UU. en Islamabad, Wendy Chamberlin, se entrevistó hoy con el Presidente paquistaní, Pervez Musharraf, el principal aliado de los talibán, para plantearle el tipo de asistencia que Washington esperaba de su gobierno.

13 de Septiembre de 2001 | 09:58 | EFE
ISLAMABAD.- Pakistán está sometido a la presión de Estados Unidos para que colabore con el Gobierno como el país vecino clave de Afganistán, donde vive refugiado el disidente saudí Osama Bin Laden, sospechoso de los atentados en Washington.

La embajadora de EE.UU. en Islamabad, Wendy Chamberlin, se entrevistó hoy con el Presidente paquistaní, Pervez Musharraf, el principal aliado de los talibán, para plantearle el tipo de asistencia que Washington esperaba de su gobierno.

Oficiales estadounidenses rehusaron comentar los asuntos tratados y sólo dijeron que ambos hablaron de las líneas maestras generales trazadas por el Secretario de Estado, Colin Powell.

El secretario de Estado destacó la importancia que EE.UU. atribuye a la colaboración de Pakistán al afirmar que "mientras reunimos información y fijamos la atención en posibles fuentes del ataque, sería oportuno subrayar que esperamos completa cooperación, su ayuda y apoyo (de Pakistán) en las investigaciones".

Uno de los objetivos de Washington, según los analistas, es que Pakistán presione a los Talibán -la milicia integrista islámica que controla el 90 por ciento de Afganistán incluida la capital Kabul-, para que entreguen a Bin Laden, al que ese país da refugio.

Estados Unidos ofrece 5 millones de dólares en recompensa por la cabeza del disidente saudí, para juzgarle también por los atentados contra sus embajadas en Africa en 1998 en los que murieron 224 personas.

La ONU impuso sanciones sobre Afganistán para forzar a su gobierno integrista a entregar a Bin Laden, pero los talibanes se negaron a extraditarlo alegando que era un invitado del pueblo afgano y que EE.UU. nunca presentó pruebas acreditativas de que fuera un terrorista.

El embajador de los talibán en Islamabad, Abdul Salam Zaeef, ha declarado la disposición del gobierno afgano a estudiar las evidencias de los investigadores estadounidenses y a considerar, a la luz de las mismas, la extradición de Bin Laden, pero los observadores no creen que el régimen de Kabul entregue al disidente saudí.

Varios diplomáticos paquistaníes se entrevistaron ayer en Kabul con altos cargos del gobierno talibán para instarles a que entreguen a Bin Laden.

Estados Unidos pidió también al gobierno paquistaní que enviara inmediatamente una delegación militar a la capital afgana, según la televisión estadounidense NBC.

Tras una reunión de urgencia con sus consejeros la pasada noche, el Presidente paquistaní prometió a EEUU que tendrá "la cooperación incansable (de su gobierno) en la lucha contra el terrorismo".

Sin embargo, Pakistán subrayó en el pasado su incapacidad para influir sobre el régimen de Kabul en lo que respecta a Bin Laden, considerado por EE.UU. su "enemigo público número uno".

Cuando Estados Unidos atacó con misiles de crucero supuestos campos de entrenamiento de Bin Laden en Afganistán, en represalia por los atentados de sus embajadas en Africa, rumores en Pakistán hablaron de que EE.UU. podría utilizar para sus ataques suelo paquistaní.

Algunos analistas en la zona creen que sólo es una cuestión de tiempo el que EE.UU. lance un ataque contra Afganistán en represalia por los atentados del martes, y hay quien no descarta que Washington estudie la posibilidad de hacerlo desde Pakistán.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?