WASHINGTON.- Agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) asumieron hoy el control de la retirada de escombros en el Pentágono en un intento por encontrar pistas sobre los ataques terroristas del 11 de septiembre pasado en Nueva York y Washington.
"Es el escenario de un crimen. Ahora la atención ha cambiado de las tareas de rescate a la búsqueda de pruebas", dijo una fuente del Departamento de Defensa.
Uno de cuatro aviones secuestrados por terroristas fue estrellado el martes de la semana pasada contra un sector del Pentágono, sede del Departamento de Defensa. Hasta ahora se ha confirmado la muerte en este incidente de 188 personas, incluyendo los piratas aéreos.
Las autoridades han identificado a los 19 secuestradores de todos los aviones y los han vinculado con terroristas sospechosos de obedecer las órdenes del saudí Osama ben Laden, al que Washington considera como el cerebro de los ataques sufridos por intereses norteamericanos en el exterior durante los últimos años.
En la búsqueda de pistas también participan personal del Departamento de Defensa y bomberos del vecino estado de Virginia.
Pese a la tragedia, el Pentágono no interrumpió sus operaciones y sus 23.000 empleados trabajaron hoy con normalidad, dijeron fuentes oficiales.
El Departamento de Defensa ha señalado que necesitará 520 millones de dólares para financiar las tareas de reconstrucción.
