MOSCU.- Un equipo de tres buzos preparaba este fin de semana las secciones de popa del submarino nuclear Kursk, hundido en el mar de Barents, para conectar los cables que se utilizarán para sacar la nave a la superficie.
Los buzos habían completado ya la instalación de las llamadas guías en los agujeros de las secciones delanteras del submarino y trabajaban al presente en los dos compartimentos posteriores de la nave, dijo la agencia noticiosa ITAR-Tass.
Vladimir Navrotsky, un vocero de la flota septentrional de la armada rusa, dijo a ITAR-Tass que algunas complicaciones técnicas retrasaban la operación, pero agregó los trabajos llegarían a su conclusión a mediados de la semana próxima.
La barcaza gigante dotada de equipos hidráulicos que ha de sacar al Kursk del fondo del mar de Barents llegará al lugar el domingo, dijo ITAR-Tass.
El submarino, que se hundió en agosto del año pasado y ocasionó la muerte de sus 118 ocupantes, será reflotado por medio de cables atados a puntales de metal o guías que han sido introducidos a traves de agujeros abiertos en el fuselaje del Kursk.
Los funcionarios dijeron que la reflotación ocurrirá el 27 de septiembre, lo que representa una postergación de doce días respecto a la fecha prevista originalmente para la dificultosa operación.
La agencia Interfax informó empero que la operación podría postergarse aún más, hasta el 29 de septiembre.