VALLE PANJSHIR, Afganistán.- Fuego de artillería y de cohetes estremeció zonas claves del norte de Afganistán al combatir el lunes fuerzas de oposición a tropas de la milicia religiosa Talibán, por el control de una estratégica región al norte de Kabul, la capital.
La lucha se ha acrecentado en el norte de Afganistán, donde la oposición controla alrededor de un 10 por ciento del territorio. El resto está en manos de los Talibán.
En el estratégico valle de Panjshir, a unos 70 kilómetros al norte de Kabul, hubo el lunes intercambio de fuego de artillería pesada y de morteros.
La oposición afgana tiene esperanzas de recibir apoyo logístico de Estados Unidos, que ha acusado al gobierno de Afganistán de albergar al exiliado saudí Osama bin Laden, principal sospechoso en los letales ataques del 11 de septiembre contra el Centro de Comercio Mundial y el Pentágono.
En declaraciones formuladas en el valle, Rajmat Ramazan, vocero de la opositora Alianza del Norte, dijo que las tropas Talibán comenzaron el domingo a bombardear sus posiciones con artillería. Ramazn dijo a periodistas que la oposición estaba preparando un contraataque.
Fuertes combates se han librado también entre el domingo en la noche y el lunes en la mañana en la provincia Balj, a unos 280 kilómetros al noroeste de aquí.
Otro vocero de la oposición, Mohammed Ashraf Nadeem, dijo que sus fuerzas habían atacado a los Talibán para tratar de ganar el control del distrito de Ak Kupruk.
Los Talibán han admitido haber perdido control de la aldea de Zari, en la provincia de Balj, a unos 100 kilómetros al sur de Mazar-e-Sherif. La pérdida de esa aldea pone en peligro el control, por parte de los Talibán, de una estratégica carretera que vincula el centro de Afganistán con Uzbekistán en el norte.
Resulta difícil confirmar las versiones de ambos bandos. Los Talibán han ordenado a los extranjeros que abandonen el país. Eso incluye a periodistas.