WASHINGTON.- Un argelino convicto de terrorismo relató hace dos meses ante un tribunal federal el tipo de entrenamiento que recibió en campamentos de Afganistán para realizar ataques con sustancias químicas, utilizadas en la muerte de varios perros a fin de demostrar su efectividad.
"En cuanto a los objetivos en general ... hablábamos sobre Estados Unidos", dijo en julio Ahmed Ressam al tribunal.
El testigo señaló además que los instructores en ese campamento recomendaron insertar veneno en las tomas de ventilación de los edificios a fin de lograr el mayor número de bajas.
Ressam declaró en el juicio de un hombre acusado de conspirar con él para atacar el aeropuerto de Los Angeles, parte de un plan terrorista con motivo de los festejos del milenio. Ressam fue convicto y cooperó con las autoridades a fin de recibir una pena más leve.
Indicó al tribunal que su entrenamiento sobre armas químicas recibido en el campamento en 1998 incluyó ver como su "jefe" colocaba un perro en un cajón, que luego roció con cianuro y ácido sulfúrico. El perro murió en unos 4 minutos, declaró Ressam.
"Queríamos conocer los efectos del gas", dijo Ressam en el tribunal federal de Nueva York. "En cuanto a los objetivos en general, sí. Sí, nos referimos a Estados Unidos como un enemigo del islam".
Los entrenados en esos campamentos aprendieron a dejar cianuro cerca de las tomas de ventilación de un edificio a fin de causar el mayor número de muertos sin correr ellos peligro, agregó.
Ressam dijo que aprendió además a mezclar venenos con sustancias aceitosas para embadurnar los pomos de las puertas, a fin de que quienes los tocaran murieran a causa de las toxinas propagadas por la sangre.
Las autoridades policiales que investigan los atentados del 11 de septiembre contra el Centro Mundial de Comercio y el Pentágono indagan la posibilidad de que sean perpetrados nuevos atentados con avionetas fumigadoras o camiones pesados destinados al transporte de materiales altamente tóxicos.
Advirtieron a las fuerzas de orden público que se mantengan atentas ante la posibilidad de que ocurran secuestros de dichos vehículos.
El multimillonario de origen saudí Osama bin Laden, a quien el gobierno de Riad anuló su nacionalidad, y su organización al-Qaida son, para el gobierno norteamericano, los principales sospechosos de los ataques. Bin Laden mantiene campamentos para el entrenamiento de terroristas en Afganistán, según los investigadores norteamericanos.
Ressam dijo a las autoridades norteamericanas que estaba aliado con un hombre residente en Londres que mantenía estrechos lazos con bin Laden.
Ressam, un argelino afincado en Montreal, fue detenido en diciembre de 1999 cuando intentaba entrar en el estado de Washington procedente de la Columbia Británica en un automóvil con material para fabricar bombas.
Las autoridades creen que Ressam formaba parte de un plan de mayor alcance para cometer atentados dinamiteros en Estados Unidos durante las celebraciones del nuevo milenio.