MEXICO, Distrito Federal.- El huracán "Juliette", que ha causado cinco muertes a su paso frente a costas mexicanas, estaba a punto de ser degradado este viernes a la categoría de tormenta tropical, pero las fuertes lluvias, vientos y oleaje seguían azotando la península de Baja California, dijeron autoridades.
A las 13.00 hora local (18.00 GMT), el centro de "Juliette", el ciclón más dañino del año, se ubicaba a 127 kilómetros al oeste-noroeste del centro vacacional de Cabo San Lucas, en el extremo de la península, según el reporte más reciente del Sistema Nacional de Protección Civil.
Agregó que el sistema, actualmente en la categoría 1 de la escala de huracanes Saffir-Simpson, tenía vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora (kph) y rachas de 150 kph. "Durante el día de hoy puede degradarse a tormenta tropical, con posibilidad de acercarse aún más a tierra. Por sus efectos, continúa latente el riesgo de incremento en nivel de ríos, inundaciones en zonas bajas y deslaves en sierras del sur" de la península, añadió.
Por su parte, un reporte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) advirtió que olas de hasta cuatro metros de altura se extienden alrededor del vórtice hasta una distancia máxima de 650 kilómetros. Agregó que el sistema tropical se mantuvo casi estacionario sobre el Océano Pacífico durante las últimas horas.
La CFE pronosticó que el centro de "Juliette" tocará tierra el sábado en los alrededores de la Bahía de Magdalena, una zona cercana al centro de la península y relativamente poco poblada, con vientos máximos sostenidos de 95 kph y rachas de 110 kph. "El centro no ha impactado, pero sus efectos se están sintiendo fuertemente en la zona sur de Baja California Sur", dijo a Reuters Raúl Rivera, subdirector de Meteorología del Sistema de Protección Civil.
"No se descarta todavía la posibilidad de impacto", agregó.
Los puertos de los Cabos y La Paz en la península de Baja California seguían cerrados el viernes.
Huracán ha dejado 5 muertos
Los primeros dos decesos provocados por el huracán se registraron el domingo en el sureño estado de Chiapas, donde las inundaciones rompieron un dique y se llevaron a dos hombres.
El jueves se encontró el cadáver de un niño de ocho años a orillas del río Coatán, en Chiapas. El menor había sido arrastrado por un alud de tierra y lodo provocado por las fuertes lluvias. Dos personas más permanecen desaparecidas en la zona.
Un turista estadounidense que no escuchó las advertencias de no nadar en el mar murió ahogado el miércoles en el centro vacacional de Cabo San Lucas.
El turista, identificado como Bill Creason, de 39 años, estaba nadando con su esposa, quien se encuentra bien.
La quinta muerte se registró en el estado de Veracruz, en las costas del Golfo de México, donde un hombre murió el miércoles sepultado por un alud de tierra de un cerro, reblandecido por las lluvias intensas, dijo una fuente de Protección Civil estatal.
"Juliette", el décimo huracán de la temporada, dejó esta semana unas 1.000 personas damnificadas en el occidental estado de Michoacán, donde las inundaciones llevaron el nivel de las aguas hasta dos metros en la ciudad de Morelia, la capital estatal.
