WASHINGTON.- Mientras se prepara para enfrentar al régimen afgano del Talibán, el presidente George W. Bush ofreció el jueves 320 millones de dólares en ayuda humanitaria al pueblo afgano y los países vecinos "en un momento de crisis y en momentos de necesidad".
Bush dijo que Estados Unidos está dispuesto a ayudar a las "pobres almas" que sufren bajo ese régimen estricto.
"Estados Unidos se mantendrá firme y se opondrá a los patrocinadores del terror, y se alzará firme para ayudar a esa gente que padece bajo esos regímenes", dijo a los empleados en una visita al Departamento de Estado.
Funcionarios de la Casa Blanca dijeron que el paquete de ayuda de Bush incluye 295 millones de dólares en asistencia a los afganos que padecen de sequías, hambruna y la amenaza de acciones militares. El dinero también ayudará a los refugiados que salen de Afganistán a países vecinos como Pakistán, Irán, Tayikistán, Uzbekistán y Turkmenistán.
Gran parte de los fondos está destinada a ayudar a los afganos a sobrevivir lo que se anticipa como un durísimo invierno. Bush dijo que servirían para comparar alimentos y medicinas.
Durante el fin de semana, Bush apeló a un fondo de emergencia y autorizó 25 millones de dólares en ayuda para los refugiados afganos. La nueva asignación eleva el paquete de asistencia a 320 millones, que serán canalizados por medio de las Naciones Unidas, la Cruz Roja y organizaciones no gubernamentales.
Bush agradeció a los diplomáticos estadounidenses por ayudarle a erigir una coalición internacional contra el terrorismo.
"Nos alzaremos firmes del lado del bien, y esperamos que otras naciones nos acompañen", dijo Bush. "Este es nuestro modo de decir que si bien nos oponemos firme y enérgicamente al régimen del Talibán, somos amigos del pueblo afgano".
Pero a la vez el presidente advirtió que "aunque somos una nación compasiva, nuestra compasión tiene un límite".
Mientras continuaba la planificación militar, Bush recibía el jueves al presidente de México y al emir de Qatar.
Poco después de los ataques terroristas del 11 de septiembre, el presidente mexicano Vicente Fox declaró su "completa solidaridad" con Estados Unidos. Pero desde entonces, Fox y sus asesores han proyectado mensajes poco claros sobre el alcance de dicho apoyo. Bush claramente quisiera ver una reafirmación del apoyo total anunciado inicialmente por Fox.
En cambio, parece no haber dudas de que cuenta con el apoyo total del jeque Hamad bin Khalifa al-Thani, el gobernante de Qatar.