LIMA.- La congresista y ex Primera Dama de Perú Susana Higushi declaró hoy que su ex marido, el ex Presidente Alberto Fujimori, le mantuvo enclaustrada durante cuatro meses e intentó envenenarla.
Al declarar ante una comisión del Congreso que investiga el golpe de Estado institucional que dio Fujimori en abril de 1992, Higuchi también se reafirmó en su versión de que el ex Presidente ordenó capturar "vivo o muerto" a su antecesor en el cargo Alan García.
La actual parlamentaria del Frente Independiente Moralizador (FIM) dijo que, después de que se produjo el golpe, estuvo cuatro meses "enclaustrada" contra su voluntad en la sede del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN).
Tras afirmar que durante ese período fue víctima de "muchos hostigamientos", dijo que "entre otras cosas, hubo electroshocks los fines de semana" y "no me dejaban trabajar, ni me dejaban salir".
"En las comidas y en los remedios (medicamentos) me echaban algo, un poco de cianuro quizá", añadió.
Al referirse al presunto intento de asesinato de García, dijo que ella escuchó de casualidad una charla entre el ex Presidente, su entonces asesor Vladimiro Montesinos y un coronel del Ejército al que identificó sólo con el apellido Pinto, y que en la conversación Fujimori "ordenó que García sea capturado vivo o muerto".
También afirmó que cuando el arresto del ex Presidente fracasó, Fujimori estalló en cólera y profirió improperios que ella y una amiga suya escucharon, según dijo, mediante una radio portátil de uno de los edecanes del ex gobernante.
Testigo de ese episodio, según la versión de Higushi, fue Nelly Campos, a quien identificó como una amiga común suya y de García, y militante del partido de éste, el Partido Aprista (PAP).
Finalmente, declaró que le avisó del supuesto peligro a García por medio de un edecán al que no identificó.
A partir del testimonio de Higushi, el Congreso aprobó hoy una nueva acusación constitucional contra Fujimori por el presunto delito "contra la libertad de la persona", en alusión a los hechos denunciados por la ex Primera Dama.
En la misma denuncia también se le acusa de otros supuestos delitos: enriquecimiento ilegal, peculado, malversación de fondos, abuso de autoridad y contra el derecho al sufragio.
