ISLAMBD.-El embajador de los talibán en Islamabad, Abdul Salam Zaeef, anunció este sábado que la milicia islamista va a liberar "hoy o mañana" a la periodista británica Yvonne Ridley, detenida el pasado 28 de septiembre por haber entrado ilegalmente en Afganistán.
En declaraciones a la agencia AIP, basada en Pakistán, Zaeef afirmó que la enviada especial del diario londinense Sunday Express sería liberada "hoy o mañana". El jefe supremo de los talibán, el molá Mohammad Omar, "ordenó (su liberación) a raíz de una petición del gobierno británico" declaró Zaeef, según AIP.
Los talibán anunciaron la próxima liberación de la reportera, de 43 años, un día después de la visita a Pakistán del primer ministro británico, Tony Blair, quien se reunió con el presidente paquistaní Pervez Musharraf.
El viernes, una fuente de los servicios de seguridad de los talibán había declarado a la AFP que "nada permitía pensar" que Ridley era "una espía".
Tras su detención, los talibán averiguaron si la reportera era efectivamente una periodista o si había entrado en Afganistán con la intención de espiar para alguna agencia de inteligencia extranjera. En Londres, la familia Ridley se declaró "aliviada" tras el anuncio de la próxima liberación de la periodista.
"Estoy contenta, es una noticia maravillosa", declaró la madre de la periodista, Joyce Ridley, de 74 años, a la BBC. "No me atrevo a entusiasmarme demasiado porque esta gente (los talibán) es tan imprevisible y hasta que se confirme y el Foreign Office me llame, no puedo dar rienda suelta a mi alegría", agregó. El Foreign Office (cancillería británica) indicó que estaba tratando de confirmar la próxima liberación de la periodista.
Ridley fue detenida poco después de haber cruzado la frontera cerca de Jalalabad (este de Afganistán), en compañía de dos guías.
Para pasar desapercibida, la periodista se había puesto una "burqah", el vestido que tienen que llevar obligatoriamente las mujeres afganas para salir de casa, según las normas de los talibán, que las cubre de la cabeza a los pies. Ridley no tenía con ella ni pasaporte ni visado de entrada. En su declaración, el embajador Zaeef no precisó la suerte de los dos guías de Ridley.