MOSCU.- Expertos militares rusos señalaron este viernes que las metas estadounidenses en su ofensiva contra Afganistán son poco claras y que la falta de una estrategia diáfana en la operación ha provocado intranquilidad en Moscú, que tuvo una amarga experiencia con una ocupación de 10 años que finalizó en derrota.
"No sabemos cuáles son los planes estadounidenses" una vez que finalice la campaña militar, indicó Pavel Felgenhauer, dijo un experto militar independiente a la Asociación de Corresponsales Extranjeros en Moscú.
Las autoridades estadounidenses han señalado que la meta de esta campaña es destruir la red de terrorismo al-Qaeda, a su líder y autor intelectual de atentados terroristas, Osama bin Laden, y a los dirigentes de la milicia del Talibán, así como dar una lección a los estados que alberguen a los terroristas.
El Presidente ruso Vladimir Putin y su gabinete de ministros han expresado su apoyo firme a la campaña encabezada por Estados Unidos para combatir al terrorismo y ofrecieron el uso del espacio aéreo ruso para vuelos humanitarios.
Sin embargo, los rusos han marcado sus diferencias en cuanto a la participación militar, ante el temor de repetir los horrores de una guerra en la que por lo menos 15.000 soldados soviéticos perdieron la vida, según cifras oficiales. Otras fuentes señalan que las bajas rusas fueron mayores. Pero lo que está claro es que ese sangriento conflicto ayudó al derrumbe de la Unión Soviética.
Moscú envió soldados a Afganistán para respaldar a un gobierno socialista que luchaba contra rebeldes islámicos apoyados por Estados Unidos.
El general Mahmud Gareyev, presidente de la "Academia Rusa de Ciencias Militares", indicó que los mandos castrenses nunca estuvieron conscientes de metas estratégicas diferentes a la de "cumplir con su deber internacionalista".
"No me gustaría que Estados Unidos repitiera los errores de la Unión Soviética. Fue nuestra inocencia militar la que nos llevó a creer que podíamos entrar en un país desgarrado por la guerra civil y mantenernos al margen", agregó Gareyev.