NUEVA YORK/BUENOS AIRES.- Pese a sus intentos, el ministro de Economía de Argentina, Domingo Cavallo, regresó hoy a Buenos Aires tras dos días de variadas gestiones en Nueva York sin lograr destrabar el desembolso de US$ 1.264 millones del FMI para su país.
De inmediato, el ministro deberá abocarse este mediodía -junto al jefe de Gabinete, Chrystian Colombo- a tratar de cerrar el crucial acuerdo entre el Gobierno y los gobernadores provinciales. Anoche, el Gobierno decidió dividir las propuestas entre las provincias que necesitan refinanciación y las que no.
Mientras se esperan los anuncios económicos luego de que se alcance el acuerdo, el riesgo-país que mide el banco de inversión JP Morgan aumentaba 2,9% hasta ubicarse en 1.777 puntos.
Según trascendió, en uno de sus encuentros más trascendente -con el titular de la Reserva Federal (FED) de Nueva York, Bill Mc Donough, Cavallo habló de "dolarización", y no de ayuda financiera por US$ 10.000 millones, como indicaron versiones periodísticas.
Voceros de la FED de Nueva York confirmaron ayer que el martes por la noche Cavallo cenó con Mc Donough. Este funcionario es uno de los pocos presidentes de las filiales del banco central estadounidense que tiene el poder de emitir
billetes.
Incluso hubo versiones de que John Taylor, subsecretario del Tesoro, participó en una reunión con el ministro de Economía.
De acuerdo a cercanos a las gestiones, la dolarización figuró entre los temas tratados, y se descuenta que entre las próximas medidas a anunciarse, se incluya el pago en dólares de sueldos e impuestos.
También circuló ayer la versión de que se prohibiría abrir nuevas cuentas bancarias en pesos (sólo se permitiría hacerlo en dólares), pero la idea queda
descartada porque se necesitaría una ley.
El ministro maneja la hipótesis de una dolarización total, pero como salida de última instancia, ya que -por ahora- prefiere insistir con la defensa de la convertibilidad.
El martes pasado, Cavallo mantuvo reuniones con Jacob Frenkel, ex presidente del Banco Central israelí y actual directivo de Merrill Lynch, con Joaquín Cottani, de Lehman Brothers, y con ejecutivos del JP Morgan Chase y del Citigroup.
Según se supo, el mensaje que dejó el ministro a cada uno de sus interlocutores fue la preocupación por la "mala imagen" que están dando las calificadoras y algunos bancos estadounidenses sobre Argentina. "No nos están reconociendo los grandes esfuerzos que hacemos para cumplir con el déficit cero, pagando un alto costo político", habría señalado.
Cavallo también aclaró una y otra vez que no se está pensando en una cesación de pagos ni en una quita de la deuda, en relación con la amenaza que hicieron las calificadoras de riesgo de pasar la deuda argentina a "default selectivo".
En ese sentido, el objetivo de Cavallo es lograr que los financistas influyentes que entrevistó transmitan un mensaje tranquilizador a Wall Street y a los funcionarios del FMI, del Banco Mundial y del gobierno de los Estados Unidos.
Incluso, trascendió que el ministro tenía originalmente como intención viajar a Washington el miércoles, pero desde el organismo internacional rechazaron la propuesta de un encuentro. La relación del FMI con la Argentina pasa por un tenso momento, y hay preocupación dentro del equipo económico por la falta de confirmación aún de la aprobación del último desembolso de este año, previsto para principios de diciembre, por US$ 1.264 millones.
El ministro aclaró además en sus encuentros que habrá un déficit fiscal importante este mes, pero que en el trimestre se respetará el objetivo del equilibrio fiscal.
Todo ello, en una jornada plagada de insistentes versiones sobre la renuncia de Cavallo a Economía y su reemplazo por el actual titular del Banco Nación, Enrique Olivera.