JOYA BAHAUDDIN, Afganistán.- Las milicias talibán de Mazar-i-Sharif preparan una segunda línea de defensa de esta ciudad del noroeste de Afganistán y han abandonado posiciones más expuestas, aseguraron hoy viernes sus rivales de la Alianza del Norte.
Tras los bombardeos estadounidenses contra las fortificaciones externas de la defensa talibán y ante el doble ataque de las tropas de Rashid Dostum y Ato Mohamed, de la Alianza del Norte, los extremistas están abandonando sus puestos permanentes en torno a Mazar-i-Sharif.
Como explicaron miembros de la Alianza del Norte, que protagonizaba hasta ahora la ofensiva bélica contra el régimen de Kabul, las milicias talibán tratan de asegurar y fortalecer una nueva línea de defensa.
El viceministro de Defensa de la Alianza, Attikulláh Baryolái, señaló ayer que las fuerzas opositoras se concentrarán ahora en la conquista del norte de Afganistán y dejarán de momento la toma de Kabul.
Los objetivos de esa ofensiva septentrional son Mazar-i-Sharif, capital de la provincia de Balj y clave para dominar el noroeste, y Talukán, centro administrativo de Tajar y cuya conquista supondría un refuerzo moral para la Alianza del Norte, que la perdió el año pasado.
Desde Talukán, los talibanes tienen ahora una base privilegiada para amenazar la capital de la Alianza en Feisabad, la capital de la provincia de Badajshán, en el extremo norte del país y donde se encuentra el gobierno en el exilio del depuesto presidente Burhanuddín Rabbaní.
Talukán y Feisabad son los dos centros del Afganistán tayiko, etnia -junto a la uzbeka- de la que proceden la mayor parte de los combatientes de la Alianza del Norte.
Si se confirmara el retroceso de las posiciones exteriores de los talibanes en la defensa de Mazar-i-Sharif, las tropas del uzbeko-afgano general Dostum podrían establecer puestos permanentes en las afueras de esa ciudad, señalaron miembros de la Alianza.
Aunque tiene avanzadillas en las inmediaciones de Mazar, la vanguardia de las tropas de Dostum se encuentran a una distancia entre 40 y 60 kilómetros de esa ciudad, mientras que el grueso de su ejército formado por uzbekos, tayikos y algunos hazaras está en la vecina provincia de Samangán, en torno al valle de Dar-i-Suf.
Pero, como reconoció ayer Baryolái, hay indicios sobre una próxima contraofensiva de los talibanes, que hasta ahora han rechazado todos los intentos opositores por arrebatarles Mazar-i-Sharif.
