MADRID.- En su primer comunicado desde los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos, la banda terrorista vasca ETA anunció este domingo que desea la paz, pero culpó a los estados de España y Francia de prolongar el conflicto que ya se extiende por más de tres décadas.
"La paz es posible, claro que sí, y la mano de ETA siempre estará tendida", dijo el grupo en el comunicado que publicaron los diarios vascos "Gara" y "Egunkaria".
En el texto, que al parecer se preparó antes de que el Ejército Republicano Irlandés (IRA) anunciara esta semana el comienzo del desarme, ETA dijo que hará "todo lo que esté en nuestras manos para que el conflicto no se prolongue otros 20 años".
No obstante las buenas intenciones, la banda armada vasca reiteró en el comunicado sus demandas de libre determinación, algo que los diferentes gobiernos españoles se han negado a negociar, aduciendo que equivaldría a capitular ante la violencia y podría llevar a la disgregación de España.
El líder en el País Vasco del gobernante Partido Popular, Carlos Iturgaiz, calificó de "repugnante" el comunicado. "Cuando dice que tiene la mano tendida, sabemos que lo que tiene la mano es cargada para seguir asesinando", dijo Iturgaiz a la estatal "Radio Nacional de España".
"La única respuesta a estos criminales es que, más tarde o más temprano, su futuro está detrás de unos barrotes, en la cárcel, pagando por los crímenes que han cometido", añadió el dirigente.
La decisión del IRA llevó esta semana a los principales partidos españoles, nacionalistas y no nacionalistas, a pedir a ETA que cese su campaña armada, que desde 1968 ha dejando más de 800 muertos.
ETA criticó a España y Francia por su apoyo a los bombardeos estadounidenses contra Afganistán y reprochó al Presidente del gobierno, José María Aznar, sus declaraciones de que no había diferencias entre ETA y los autores de los atentados del 11 de septiembre en Nueva York y Washington.
"El conflicto que España y Francia tienen con Euskal Herria se puede resolver sin misiles, de forma democrática, simplemente dejando decidir al pueblo", dijo el comunicado.
El grupo separatista reclamó la responsabilidad por 11 atentados desde julio, incluidas la detonación de varias bombas contra la industria turística.
ETA se ha responsabilizado previamente de 35 muertes desde que suspendió, a fines de 1999, una tregua unilateral de 14 meses. El domingo en la madrugada, un grupo de presuntos simpatizantes de ETA lanzó bombas incendiarias contra una instalación policial en San Sebastián mientras que en Guipúzcoa, la casa de una familiar de un concejal del Partido Nacionalista Vasco también fue atacada con bombas incendiarias. No hubo victimas ni detenidos, dijo la policía.
Entre sus acciones más recientes, ETA dijo que el coche-bomba que estalló el viernes 12 en un aparcamiento de la Plaza de Colón iba dirigido contra una central de la compañía Telefónica en Madrid y atribuyó a la "irresponsabilidad de la policía" el desplazamiento del vehículo a otro lugar.
Casi la mitad de los votantes vascos respaldan a partidos que favorecen las iniciativas hacia la libre determinación del País Vasco o la plena independencia de la región, que abarca áreas del norte de España y suroeste de Francia.
Pero un partido allegado a ETA vio su porción del voto declinar a poco más del 10 por ciento en las elecciones regionales de mayo, en lo que se consideró ampliamente como un rechazo de la campaña de asesinatos del grupo.
El gobierno español se niega a ofrecer concesión alguna a los separatistas. Se cree que una serie de arrestos ha debilitado a ETA y la intensidad de los ataques ha disminuido en los últimos meses.
Madrid confía en que una cooperación más intensa contra el terrorismo en Europa, tras los ataques que en septiembre dejaron en Estados Unidos más de 5.400 muertos, resultará en mayores presiones sobre ETA.