WASHINGTON.- Las Tropas de elite de Estados Unidos e Israel se han entrenado conjuntamente para capturar las cabezas nucleares de Pakistán en caso de un golpe de Estado o conflicto civil que aparte del poder al presidente de ese país, Pervez Musharraf, informó este lunes la revista "The New Yorker".
El objetivo de una hipotética operación de ese tipo sería evitar que el arsenal nuclear paquistaní pudiera caer en manos poco seguras, como extremistas musulmanes o la red Al Qaeda, que supuestamente dirige Osama bin Laden.
La unidad militar estadounidense, con ayuda de la CIA, tiene experiencia en entrar en otros países sin ser detectada para desmantelar armas o instalaciones nucleares de otros países.
Según "The New Yorker", EE.UU. coopera en este asunto con Israel, quien ha aportado la llamada "Unidad 262", especializada en realizar operaciones detrás de las líneas enemigas.
La unidad israelí llegó a Estados Unidos poco después de los atentados del 11 de septiembre y hasta la semana pasada realizaba entrenamiento conjunto con la fuerza de elite estadounidense en un lugar que no ha sido divulgado, señala la información, firmada por el reportero Seymour Hersh.
La posible entrada en acción de ese contingente sólo ocurriría en caso de que Musharraf perdiera el poder.
EE.UU. no sólo teme que se usen armas nucleares contra su territorio, sino también el posible desencadenamiento de una guerra atómica con India, otra potencia nuclear, con la que Pakistán mantiene un viejo contencioso por la región de Cachemira, origen de dos guerras previas entre ambos países.
Poco después de los atentados terroristas del 11 de septiembre, Musharraf apartó del poder a tres altos oficiales de la inteligencia militar directamente implicados con el apoyo a los talibán.
Según indicaron fuentes del Gobierno de EE.UU. a la revista, se cree que Musharraf se mantiene sólidamente en el poder, a pesar de que su apoyo a Washington ha causado protestas internas.
Además, el Presidente paquistaní ha asegurado a George W. Bush que el arsenal nuclear está controlado por "los militares más fiables" y que en caso de una crisis "los desarmaría", añade la revista.
El espionaje estadounidense cree que Pakistán tiene hasta 24 cabezas nucleares, que pueden ser transportadas en cazabombarderos F-16 de fabricación estadounidense o en misiles de alcance medio.
Otro hecho que ha aumentado la preocupación en Washington es, según la revista, la detención en Pakistán de dos veteranos científicos nucleares ya jubilados, por supuestas relaciones con los talibán.
La información cita a un destacado miembro del espionaje estadounidense, quien reconoce que esa detención es "la punta de un peligroso iceberg", porque indicaría que el sentimiento a favor de los talibán se ha infiltrado entre los científicos nucleares paquistaníes, con el riesgo de que el fundamentalismo sustituya a la lealtad al Estado.