WASHINGTON.- El Presidente estadounidense, George W. Bush, designó el miércoles a Sean O’Keefe, un funcionario de presupuesto de la Casa Blanca que ha instado a imponer controles estrictos como jefe de la agencia espacial estadounidense.
“El es un asesor clave del presidente, tiene una estrecha relación con el personal de la Casa Blanca y su nombramiento señala la importancia que asigna el presidente a la dirigencia de la NASA en el siglo XXI” dijo la portavoz de la Casa Blanca Anne Womack.
O’Keefe, subdirector de la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca, instó recientemente a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), a controlar los costos de la Estación Espacial Internacional y dijo que otra reforma vital era la continua privatización del programa de transbordadores espaciales.
“Reconozco que, aunque desagradables en el futuro inmediato, estas reformas son la medicina que devolverán la salud a la NASA y producirán grandes beneficios a la nación a largo plazo”, dijo O’Keefe en un testimonio ante el Congreso la semana pasada.
Si su nombramiento es confirmado por el Senado de Estados Unidos, O’Keefe reemplazaría al administrador de la NASA Dan Goldin, quien anunció el 17 de noviembre que renunciaría, argumentando que desea pasar más tiempo con su familia.
O’Keefe, un ex profesor de negocios y política gubernamental en la Universidad de Syracuse, tiene amplia experiencia en el gobierno, tras haber trabajado como secretario de la Marina bajo el presidente George Bush (padre) y como auditor en el Departamento de Defensa.
Un funcionario estadounidense que pidió no ser identificado dijo que el ojo crítico de O’Keefe para los costos fue una de las razones de que Bush lo seleccionara para dirigir la NASA, que ha sido acusada de mala administración por los crecientes costos de la Estación Espacial Internacional, que aún está en construcción, pero ya está habitada. O’Keefe “comprende la importancia de la responsabilidad fiscal”, dijo el funcionario.
Un panel independiente de expertos criticó a la NASA este mes por su manejo de la Estación Espacial Internacional cuando la agencia cumplió el primer aniversario desde que envió una misión de astronautas a trabajar en la plataforma orbital, valorada en 95.000 millones de dólares.