BONN.- La conferencia sobre el futuro político de Afganistán comenzó hoy sus deliberaciones en la residencia de Petersberg, un amplio complejo de huéspedes del gobierno alemán en las afueras de la antigua capital alemana Bonn.
En un mensaje transmitido al inicio de la reunión, el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, destacó que con esta reunión “se abre una nueva era para Afganistán”. El mensaje de Annan fue leído por el representante especial de Naciones Unidas y titular de la reunión, el diplomático argelino Lajdar Brahimi.
Annan apeló a los dirigentes afganos reunidos en Bonn a asumir la “oportunidad histórica que se le presenta ahora a Afganistán”, y tener el “coraje necesario para romper el círculo vicioso de la violencia y la miseria” y “respetar los intereses de su pueblo por encima de todo lo demás”.
A la reunión asisten unos 50 delegados y asesores, así como observadores internacionales. La conferencia se celebra en medio de las más severas medidas de seguridad.
A la sesión de inauguración asistió asimismo el ministro del Exterior alemán, Joschka Fischer, quien apeló a los principales dirigentes políticos afganos a asumir las responsabilidades que les corresponden para el futuro político y civil de su país.
“Después de dos décadas de una terrible guerra, sus compatriotas anhelan paz y estabilidad”, dijo Fischer al abrir las sesiones con una reunión plenaria, a la que seguirán reuniones en varios grupos de trabajo. “Afganistán tiene ahora la inmejorable oportunidad para lograr la paz y la reconstrucción, la posibilidad de convertirse en un Afganistán unido e independiente”, agregó.
En la reunión, organizada bajo el auspicio de la ONU, toman parte cuatro grupos afganos: los llamados Grupo de Roma, en torno al ex rey Zahir Shah, el Grupo de Chipre, la Asamblea de Peshawar y la Alianza del Norte.