BUENOS AIRES.- El ministerio argentino de Economía negó la noche del martes que el Fondo Monetario Internacional haya pedido una devaluación del peso, que tiene una paridad de uno a uno con el dólar desde 1991, se informó oficialmente.
A través de un breve comunicado, el Palacio de Hacienda desmintió que "los organismos multilaterales de crédito hayan propuesto llevar a cabo una devaluación del peso", en respuesta a versiones de prensa publicadas este martes.
Según la nota, el ministro de Economía, Domingo Cavallo, "quiere destacar el respeto de estos organismos para con el derecho soberano de la República Argentina a decidir sobre sus políticas económicas".
El diario Clarín le atribuyó a Cavallo haber dicho durante una reunión con empresarios y gremios que "el Fondo presiona para que devaluemos el paso".
El gobierno de Fernando De la Rúa negó en numerosas ocasiones una salida de la Convertibilidad (un peso igual a un dólar), un sistema que puso en vigencia Cavallo hace un decenio, cuando ocupaba el mismo cargo en la administración de Carlos Menem (1989-99).
Una misión del FMI examina desde el lunes en Buenos Aires si Argentina cumplió con el Déficit Fiscal Cero (DFC), la llave que abriría la puerta de un indispensable desembolso de 1.264 millones de dólares del instituto financiero.
Los técnicos del Fondo analizaban este martes el demorado Presupuesto 2002, que incluirá fuertes recortes en los gastos estatales, y el acuerdo fiscal con las provincias, otro pilar para cumplir con el déficit cero, señalaron medios de prensa.
En grave situación financiera, Argentina avanza en la primera fase de un canje de títulos de la deuda pública con una reducción del interés del 11 al 7%, que le permitiría ahorrar unos 4.000 millones de dólares, a cambio de garantizar el pago con la recaudación impositiva.
Se estima que unos 60.000 millones de dólares de los 95.000 millones en bonos entrarán en la reestructuración de la deuda pública, cuyo monto global es de 132.000 millones (46% del Producto Interno Bruto).
