KABUL/BONN.- El líder máximo del régimen Talibán exhortó este jueves a sus fuerzas a luchar hasta el final, mientras los infantes de marina de Estados Unidos se preparaban para entrar en acción e informes de deserciones sugerían que el grupo integrista islámico podría estarse desmoronando.
En las conversaciones en Bonn sobre un Afganistán después que caiga completamentte el régimen integrista, la victoriosa Alianza del Norte expresó reservas sobre pacificadores extranjeros y accedió en principio compartir el poder con partidarios del antiguo rey del país.
Sin embargo, el ministro de Relaciones Exteriores de la Alianza del norte, Abdullah Abdullah, dijo el jueves que su grupo era flexible sobre los pacificadores.
"Preferiríamos que fuera una fuerza afgana, compuesta por todos los grupos étnicos", dijo Abdullah a la cadena CNN en Kabul. "Sin embargo, si tenemos que decidir sobre una fuerza multinacional, lo consideraremos positivamente".
Acorralados por los bombardeos estadounidenses, en la mirilla de los infantes de marina y resistiendo ataques de tribus afganas rivales, los combatientes del Talibán se han concentrado en su bastión sureño de Kandahar y su máximo líder les ha prohibido rendirse.
"No abandonen ningún área. Esto no es una cuestión de tribus. Es una cuestión del islamismo", dijo el mullah Mohammad Omar el miércoles en un mensaje por radio.
Omar y su movimiento sufren la embestida de Estados Unidos por dar abrigo al líder islámico Osama bin Laden, a quien Washington considera el cerebro detrás de los atentados del 11 de septiembre contra el Pentágono y el World Trade Center, en que murieron casi 4.000 personas.
En el frente de batalla, las fuerzas de la Alianza del Norte dijeron que habían recuperado el control de una fortaleza cerca de la ciudad norteña de Mazar-e-Sharif, donde centenares de prisioneros de la organización Al Qaeda de bin Laden murieron en una revuelta sofocada por bombardeos estadounidenses e intensos ataques por tierra.
La Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) informó que Johnny Micheal "Mike" Spann, de 32 años, agente del servicio clandestino Directorado de Operaciones, murió en la batalla. Fue la primera baja militar estadounidense desde que comenzó la guerra el 7 de octubre.
Otro agente de la CIA que trabajaba con Spann, quien estaba armado, logró escapar vivo de la revuelta. Un nuevo contingente de varias decenas de tropas de la 10° División de Montaña de Estados Unidos, entrenados para combatir en terrenos montañosos, se unió a las fuerzas terrestres de los infantes de marina que estaban en Afganistán, dijo el Pentágono.
CNN informó que los recién llegados montarían guardia en el aeropuerto de Mazar-e-Sharif.
Principales líderes
Un funcionario de defensa de Estados Unidos dijo que tropas del Talibán en el sur de Afganistán "cavaban furiosamente" en los escombros de un complejo de jefaturas destruido por bombas estadounidenses.
"Para nosotros es una señal del éxito de los ataques". No había indicios, sin embargo, de que los principales dirigentes del Talibán o Al Qaeda estaban en el lugar en el momento del bombardeo.
En Islamabad, un portavoz del Talibán dijo que el mullah Omar estaba vivo y se desconocía el paradero de bin Laden. El Pentágono ha dicho que su objetivo es perseguir a los líderes.
"Si desmantelamos la dirigencia del Talibán y de Al Qaeda, habrá muy poca motivación en las tropas para mantenerse leales a la causa y seguir la lucha", dijo a la prensa el contraalmirante John Stufflebeem.
Sin embargo, un portavoz de la Alianza del Norte dijo el jueves que bin Laden está vivo y se esconde en las montañas del este de Afganistán cerca de Pakistán o en los desfiladeros próximos a Kandahar.
El portavoz agregó que el mullah Omar está vivo también. "Ellos están vivos todavía y siguen en Afganistán", dijo Habeel y señaló dos sitios donde podrían estar escondidos.
La cadena estadounidense de televisión CBS dijo el miércoles que un grupo de funcionarios de alto rango del Talibán, entre ellos el jefe de inteligencia militar y al menos dos ministros del gobierno, desertaron y están actualmente en Pakistán.
Uno de los ministros no identificados declaró que estaba "hastiado" de "los métodos estúpidos y peligrosos" del mullah Omar, reportó CBS. El jefe de inteligencia del Talibán podría haber desertado a la Alianza del Norte, dijo a Reuters un funcionario de Estados Unidos.
