KABUL.— La Organización de las Naciones Unidas dijo que millares de personas han huido de Kandahar, tras bombardeos aéreos de Estados Unidos, y ataques de combatientes contra el último bastión de la milicia religiosa talibán en el sur de Afganistán.
Un comandante de la tribu pashtun enemigo de los talibanes dijo que tropas extranjeras leales al millonario saudí Osama bin Laden impiden rendirse a desmoralizados defensores de la ciudad.
Bin Laden ha sido acusado por Estados Unidos de ser el autor intelectual de los atentados del 11 de septiembre contra el Centro de Comercio Mundial y el Pentágono.
Entre tanto, el mullha Mohamed Omar, líder religioso de los talibanes, ha jurado defender a Kandahar hasta la muerte.
Peter Kessler, vocero del Alto Comisionado para los Refugiados, que depende de la ONU, calculó que unos 8.000 afganos han cruzado a Pakistán desde la intensificación del conflicto la semana anterior.
"Se estima que unas 2.000 personas abandonan diariamente la provincia de Kandahar y buscan ayuda", dijo Kessler.
Aquellos que han llegado al puesto fronterizo paquistaní de Chaman han dicho que el caos y el miedo han cundido en Kandahar.
Las condiciones en torno a Kandahar no eran claras el lunes, y versiones de enfrentamientos no pudieron ser confirmadas. Los talibanes se niegan a dejar ingresar a periodistas extranjeros en aéreas bajo su control.
Hamid Karzai, un poderoso líder tribal pashtun, dijo el lunes que sus fuerzas se hallaban a 30 kilómetros al norte de Kandahar y no habían encontrado resistencia. Añadió, sin embargo, que combatientes extranjeros de al-Qaeda impiden capitular a talibanes afganos.
"Ellos no pueden abandonar la ciudad para rendirse", dijo. "Los árabes han bloqueado las salidas de Kandahar".