BRUSELAS.- Los ministros de Relaciones Exteriores de la UE decidieron hoy mantener su “posición común” sobre Cuba que condiciona las relaciones con ese país y reclama reformas en materia de derechos humanos y una apertura política para establecer una cooperación.
“El Consejo (de ministros de la UE) sigue observando, en dicho país, insuficiencias graves en lo relativo a la aplicación de las libertades civiles y políticas y la negativa de las autoridades cubanas a plantear reformas que lleven a un sistema político fundamentado en dichos valores”, señala una declaración aprobada por los Quince.
No obstante, la UE da cuenta también de “algunos indicios” positivos y en concreto señala “una mayor libertad religiosa, la no aplicación de la pena de muerte desde hace dos años, una reducción sensible del número de los presos políticos y un aumento de las ratificaciones de instrumentos de la ONU en derechos humanos”.
Por ello, los ministros creen que la política seguida hasta ahora por la UE “aún es válida”, pero también anuncian que proseguirán el diálogo político reanudado recientemente con La Habana.
Los Quince consideran “esencial” continuar con dicho diálogo para que “pueda dar resultados tangibles, en particular en lo relativo a una futura cooperación basada en el respeto de los principios democráticos , de los derechos humanos y las libertades fundamentales y del Estado de Derecho”.
En este sentido, los socios de la UE subrayan que esperan “muestras claras por parte del Gobierno cubano en el sentido de la realización de los objetivos de la Posición Común” sobre Cuba.
Recuerdan también la importancia que la Unión confiere “a la adhesión de Cuba a los principios contenidos en el Convenio de las Naciones Unidas relativo a los derechos civiles y políticos y en el referido a los derechos económicos, sociales y culturales”.
Los Quince expresan el deseo de que Cuba pueda firmar esos convenios “a la mayor brevedad”. La declaración aprobada hoy por los ministros de Exteriores de la UE se refiere también a las dificultades económicas que atraviesa Cuba.
En este contexto, destacan la importancia que “la contribución del aumento de los intercambios económicos, comerciales y de turismo entre la UE y Cuba puede tener para mejorar la situación en el país”.
Por ello, los ministros animan a las autoridades cubanas a “ampliar y profundizar las reformas económicas y jurídicas iniciadas”.
Consideran también que la Unión Europea “debe aumentar sus esfuerzos de cooperación” con Cuba, especialmente a través de las organizaciones civiles no gubernamentales.
Los ministros se congratularon de la decisión del Parlamento cubano, del 4 de octubre, de aprobar la adhesión del país a todos los convenios de la ONU contra el terrorismo.
Estas son las conclusiones de la décima revisión semestral que los jefes de la diplomacia de los quince países de la Unión Europea realizaron sobre la “posición común” sobre Cuba.
Dicha política común fue aprobada por los Quince en 1996 y en ella se condiciona la cooperación de la UE con ese país a una apertura democrática del régimen de Fidel Castro.
La UE y Cuba alcanzaron un acuerdo para reanudar el diálogo político el pasado mes de noviembre en Nueva York. Una troika de altos funcionarios comunitarios visitó recientemente la isla para reabrir ese diálogo.
