KANDAHAR.— Centenares de infantes de marina estadounidenses ocuparon el viernes el derruido aeropuerto de Kandahar, durante su mayor despliegue desde que las fuerzas norteamericanas establecieron una base en el sur de Afganistán.
Algunos marines aterrizaron en el aeropuerto a bordo de varios helicópteros, en las primeras horas de la mañana, mientras que otros llegaron en un convoy de vehículos, camionetas y camiones para transporte de personal. Los afganos alzaron al aire sus fusiles AK-47 y lanzacohetes al paso del convoy.
Sin embargo, los marines se mantenían en guardia mientras atravesaban la ciudad, donde proliferan las armas tras 29 años de guerra.
"Ellos están felices de vernos, pero estén conscientes de que hay todavía ahí mucha gente que no nos quiere", dijo el general James Mattis a los soldados, antes que partieran.
Los vehículos estadounidenses se estacionaron en diversos puestos en el perímetro del aeropuerto, 10 kilómetros al sureste de Kandahar, el ex bastión del Talibán. Los soldados removían escombros del edificio de la terminal y buscaban minas y trampas.
"Hay mucho arsenal no detonado", dijo el capitán David Romley, un portavoz de los marines. "Estamos actualmente revisando el aeropuerto para determinar dónde están los campos minados".
Cerca del anochecer, los marines habían inspeccionado prácticamente la mitad de los edificios del aeropuerto, dijo el teniente James Jarvis en el campamento Rhino, unos 110 kilómetros al suroeste de Kandahar, donde las fuerzas instalaron una base de operaciones de avanzada, el 25 de noviembre.
Jarvis dijo también que los marines habían determinado que la pista podía recibir aviones, pese a algunos agujeros. Las fuerzas no informaron para qué sería utilizado el aeropuerto, pero podría servir como un punto de distribución de provisiones de socorro para la población civil.
Más tropas planeaban llegar el viernes a la instalación, pero estaban rezagadas por una "potencial amenaza a las aeronaves entrantes", dijo Jarvis. No especificó en qué consistía dicha amenaza, pero dijo que los marines en tierra estaban investigando.
"Es un retraso menor en nuestro cronograma", dijo Jarvis. "Pudo haber ocurrido un retraso mayor si esto hubiera derribado una de nuestra aeronaves".
El Aeropuerto Internacional de Kandahar fue el escenario de varios combates intensos hasta que el Talibán abandonó la ciudad hace una semana.