BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) plantea pedir hoy a EE.UU. que consulte con la comunidad internacional antes de decidir eventuales acciones contra otros países más allá de la que lleva a cabo en Afganistán.
Los líderes de la Unión estudian un borrador del documento de conclusiones de la cumbre de Laeken (Bruselas), en el que se considera que EEUU deberá recibir la luz verde de la comunidad internacional si decide ampliar las operaciones militares llevadas a cabo en Afganistán.
“Una eventual extensión geográfica de esas operaciones no podrá hacerse sin la aprobación previa de la comunidad internacional”, señala el texto.
Destaca también que tras la caída de los talibanes, “el objetivo de las operaciones militares dirigidas por la coalición en Afganistán sigue siendo eliminar la red de Al Qaeda” de Osama bin Laden.
La Presidencia belga de la UE ha incluido también en el borrador de las conclusiones “el compromiso (del Consejo Europeo) de participar en los esfuerzos de la comunidad internacional para restaurar la estabilidad en Afganistán”, en alusión a la eventual intervención de los países europeos en una fuerza de paz.
Los dirigentes de la UE “animan al despliegue de una fuerza internacional de seguridad, que tendrá como mandato, sobre la base de una resolución del Consejo de seguridad de la ONU, contribuir a la seguridad de las administraciones afganas e internacionales instaladas en Kabul y en sus alrededores”.
Además, tendrá también por misión “establecer y adiestrar una nueva fuerza afgana de policía y militar”, señala el proyecto de las conclusiones propuesto esta mañana por la Presidencia a los demás socios de la UE. “Los estados miembros de la Unión examinarán su contribución a esta fuerzas”, agrega el texto.
La participación de los países de la Unión “constituirá una señal fuerte de su voluntad de asumir mejor sus responsabilidades en materia de gestión de crisis y de contribuir así a la estabilización de Afganistán”, agrega el documento propuesto.
El ministro belga de Exteriores, Louis Michel, dio ayer viernes por acordado entre los Quince la futura participación de los países de la UE en la fuerza de paz para Afganistán y lo calificó de “precedente” de futuras actuaciones militares de la Unión Europea.
Sin embargo, esas declaraciones de Michel causaron cierta sorpresa y malestar entre algunos de sus socios, especialmente Dinamarca y los neutrales, que no se sintieron plenamente identificados con ellas.
