KANDAHAR, Afganistán.- Los infantes de marina estadounidenses están preparando el aeropuerto de Kandahar (sur) para recibir a 300 presos de Al Qaeda que deben rendirse o ser capturados en las montañas de Tora Bora (este), informó un oficial este sábado.
Las fuerzas estadounidenses están preparándose para "recibir a los prisioneros de Tora Bora y construyendo un espacio para ellos’’ en el aeropuerto de Kandahar, en manos de fuerzas estadounidenses desde el viernes, dijo bajo anonimato este oficial.
Añadió que la construcción que preparan podría albergar a "entre 100 y 300 prisioneros" y sostuvo que los hombres de Al Qaeda se rendirán o serán capturados.
Sin embargo, un comandante afgano de la región de Tora Bora, Mohammad Palawan, dijo que los 300 milicianos de Al Qaeda que habían prometido entregarse por la mañana no lo hicieron.
Además, 19 expertos militares y civiles norteamericanos llegaron el viernes por la noche a Kandahar para investigar la eventual presencia de armas nucleares, químicas y biológicas, anunció este sábado un oficial.
La llegada se produce tras el descubrimiento de "municiones con inscripciones extrañas", documentación y correos electrónicos cerca del aeropuerto de Kandahar, explicó el oficial, que exigió el anonimato.
Precisó que no se ha podido establecer un vínculo definitivo entre el hallazgo y la existencia de armas de destrucción masiva.
El equipo llegó a Kabul el jueves, de ahí fue a Campo Rhino y luego el viernes a Kandahar, explicó.
Los vuelos de helicópteros norteamericanos en el aeropuerto de Kandahar se reanudaron la noche del viernes al sábado, indicaron oficiales estadounidenses, después de una falsa alarma.
El restablecimiento se produjo después de que los militares estadounidenses comprobasen que una batería de misiles antiaérea de las inmediaciones estaba en manos de combatientes de afganos aliados de Estados Unidos, precisaron.
"Los vuelos se han reanudado", dijo a los periodistas un portavoz de los marines, el comandante Chris Hughes.
El oficial señaló que un puesto de misiles tierra-aire, en manos anteriormente de combatientes talibanes o del grupo Al Qaeda, había dejado de ser considerdo una "amenaza" al confirmarse que había pasado a "los aliados".
"Este material, antes en manos de Al Qaeda está ahora en manos de fuerzas amigas. De todos modos, esperábamos la confirmación de que no iban a dispararnos", añadió.
Los infantes de marina, según él, no pueden descartar la posibilidad de que los combatientes de Al Qaida se encuentren en la zona y puedan utilizar un equipamiento semejante.
Los oficiales señalaron además que los vuelos en el aeropuerto fueron interrumpidos el viernes por las fuertes tormentas.
Centenares de marines, a bordo de helicópteros, vehículos blindados ligeros y otros vehículos, tomaron posesión el viernes de madrugada del aeropuerto de Kandahar, para contar con una base avanzada en el desierto al sur de la ciudad que permita la llegada de vuelos militares o civiles.
Tras haber retirado las minas y las bombas del aeropuerto, los marines estudian entregárselo a las fuerzas locales afganas antitalibanes, ahora en el poder en Kandahar.
El comandante Hughes señaló que, por lo que sabía, de momento sólo pueden aterrizar helicópteros en el aeropuerto y no aviones.
Estos últimos sólo podrán aterrizar cuando las pistas estén limpias de ruinas, aseguró. El aeropuerto y la ciudad de Kandahar fueron objeto de dos meses de bombardeos, desde el 7 de octubre hasta hace ocho días.