BUENOS AIRES.- El oficialismo y la oposición criticaron el miércoles la decisión del Presidente Fernando de la Rúa de decretar el estadio de sitio en todo el país para hacer frente a una ola de saqueos a supermercados y comercios que dejaron un saldo de cuatro muertos.
El estado de sitio es una medida excepcional a la que puede recurrir el gobierno para restringir libertades individuales en casos de grave peligro o por causa de conmoción interna.
"La solución a los problemas de la Argentina no es la represión sino el cambio del modelo económico", dijo en un comunicado la Confederación General del Trabajo (CGT), principal central obrera del país.
Centenares de manifestantes tomaron las calles en las afueras de Buenos Aires en busca de alimentos, en la peor jornada de violencia que se registra en el país desde fines de los años 80.
"Hace mucho tiempo que desde la CGT venimos advirtiendo a los máximos dirigentes del país adonde nos llevaba este modelo de exclusión", añadió en referencia a los sucesivos planes de ajuste que aplicó en vano el gobierno para reactivar a la economía.
Hasta el partido de De la Rúa, la centrista Unión Cívica Radical (UCR), acusó al gobierno de llevar al país al estado de tensión social al aplicar su modelo económico que incluye un recorte en las pensiones de jubilados y salarios a estatales, con el fin de lograr llevara cero el déficit público.
"La situación de desborde social es la absoluta demostración del fracaso del programa económico de este gobierno", dijo la jefatura de la UCR de la provincia de Buenos Aires.
"El responsable principal es el Ministro de Economía Domingo Cavallo, expresión de un modelo. No alcanza con su renuncia sino que se requiere una acción inmediata del gobierno que debe convocar urgente a la unidad nacional", añadió.
En tanto, el diputado radical Marcelo Sturbin afirmó que "si la única medida para paliar esta situación es decretar el Estado de sitio, el gobierno está equivocado. Es evidente que se ha producido un estallido que es muy difícil de controlar".
En tanto, el opositor peronismo, que prácticamente controla el Congreso bicameral y tiene bajo su mando a 13 de las 24 provincias provinciales, también criticó la declaración del estado de excepción.
Los dirigentes "tienen una posición tomada de rechazo al estado de sitio", dijo un portavoz del partido.