RIO DE JANEIRO.- La Defensa Civil reforzó la alerta máxima en todo el estado de Río de Janeiro ante la previsión de posibles lluvias de granizo en las próximas 48 horas, después de la torrencial precipitación en la noche de domingo al lunes, que dejó 43 muertos y 48 desaparecidos.
Informes sobre el número de víctimas llegaron a elevar a 45 el número de muertos por los deslizamientos de lodo causados por las lluvias, pero la Defensa Civil informó que se comprobó que el fallecimiento de dos personas incluidas en esa lista no guardó relación con el desastre.
Este miércoles, 3.000 hombres de la Defensa Civil, el Cuerpo de Bomberos y soldados del Ejército fueron movilizados en todo el estado de Río de Janeiro para ayudar en la recuperación de las zonas afectadas por los deslizamientos de lodo o inundaciones.
En Paracambí, en la periferia pobre de Río de Janeiro, soldados del Ejército se sumaron este miércoles a grupos de voluntarios para limpiar toneladas de lodo acumulado en el centro del municipio y que invadió residencias y establecimientos comerciales.
A unos 80 kilómetros al oeste de Río de Janeiro, en la ciudad montañosa de Petrópolis -la zona más afectada por los deslizamientos y derrumbes, que dejaron un saldo de 28 muertos- los equipos de peritos y voluntarios continúan la penosa tarea de buscar a las 48 personas que siguen desaparecidas.