NUEVA DELHI.- Cientos de residentes en la frontera de India y Pakistán han huido de sus hogares en los últimos días, mientras las dos naciones se declararon a favor de la paz a la vez que se preparaban para la guerra.
El primer ministro indio, Atal Behari Vajpayee, dijo que haría todo lo que esté a su alcance para evitar un conflicto armado, pero prometió continuar presionando para que Pakistán tome medidas contra los grupos extremistas responsables de un ataque contra el parlamento indio en diciembre.
Nueva Delhi afirma que esos grupos están radicados en territorio paquistaní, algo que Islamabad niega.
"Nuestro objetivo es poner fin al terrorismo... patrocinado por Pakistán... Usaremos todos los medios y recursos bajo el poder de la India para alcanzar ese objetivo", dijo Vajpayee en una convención de su partido Bharatiya Janata.
El canciller paquistaní, Abdul Sattar, dijo que había una gran posibilidad de que una pequeña acción pudiera echar a andar una cadena de sucesos que podrían terminar en un conflicto bélico entre los dos países, ambos con arsenales nucleares.
"La posibilidad de... que una pequeña acción pueda desatar una cadena de acciones y reacciones que conduzcan a un conflicto que ninguna parte desea es desafortunadamente muy alta", dijo en conferencia de prensa.
"Pakistán no busca ninguna guerra, local o general, convencional o nuclear, con India", añadió.
Islamabad dijo que estaba dispuesta a realizar una cumbre con Nueva Delhi durante una reunión regional en Nepal la semana próxima, pero India exigió primero lo que describió como acción firme de Pakistán contra el terrorismo.
Evacuan poblados
Los intercambios diarios de disparos en la línea de control que separa a Pakistán e India han causado la muerte de civiles y autoridades de ambos países han ordenado la evacuación de algunos poblados.
La policía india dijo que entre el 50 y el 80 por ciento de los pobladores que viven en varias áreas del disputado estado indio de Jammu y Cachemira emigraron a lugares más seguros la semana pasada, muchos de ellos refugiándose en escuelas y edificios gubernamentales.
Funcionarios paquistaníes dijeron el sábado que disparos del ejército indio a través de la Línea de Control que divide Cachemira había obligado a realizar evacuaciones también en su lado de la región.
"Esto se ha hecho como medida de precaución", dijo un funcionario de la policía en Muzaffarabad, capital del estado paquistaní Azad Cachemira.
India y Pakistán han reforzado su frontera conjunta con tropas y equipos, incluyendo tanques, aviones de combate y artillería en el mayor emplazamiento de tropas en casi 15 años.
Once personas, incluyendo seis rebeldes, tres civiles y un soldado indio murieron en las últimas 24 horas en varios tiroteos en el estado de Jammu y Cachemira, dijo la policía india.
Mientras ambos países concentran tropas en la frontera e intercambian sanciones, el presidente George W. Bush dijo que Estados Unidos trabajaba para restaurar la calma y evitar una cuarta guerra entre los vecinos del sur de Asia.
Las relaciones entre Pakistán y la India se acaloraron luego de un atentado perpetrado contra el parlamento indio el 13 de diciembre, en el que murieron 14 personas, incluyendo los cinco atacantes.
India acusa del ataque a dos grupos paquistaníes que luchan contra su dominio en la región de Cachemira, que comparten ambos países.