SANTIAGO.- En un avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea partió hoy rumbo a Lima la ayuda humanitaria enviada por el Gobierno chileno a Perú para colaborar con los damnificados y heridos del fin de semana último, cuando se generó un gigantesco incendio por la manipulación de fuegos artificiales que se encontraban indebidamente almacenados.
La ministra de Relaciones Exteriores, María Soledad Alvear, concurrió hasta el grupo 10 de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) ubicado en el aeropuerto internacional Arturo Merino Benítez, para despedir a la delegación que viajó a Perú y que estaba encabezada por el director de la Oficina Nacional de Emergencia (ONEMI), Alberto Maturana, quien evaluará en terreno las necesidades de las autoridades peruanas.
También llegaron al lugar el subsecretario del Interior, Jorge Correa Sutil, y el subsecretario de Aviación, Nelson Haddad.
La canciller precisó que la ayuda humanitaria, que recordó fue determinada por el Presidente de la República, Ricardo Lagos, contempla carpas, alimentos, medicamentos y un equipo de salud para colaborar en la atención de los heridos, particularmente en el manejo de quemados críticos y maquinaria para la preparación de injertos.
La delegación de profesionales también estaba integrada por la doctora Patricia Hernández del Servicio Médico Legal, dos funcionarios de Investigaciones y uno de la Cancillería.
En este marco, la ministra Alvear destacó la labor del Servicio Médico Legal en el reconocimiento de víctimas, al explicar que "Chile tiene una experiencia bastante importante en este ámbito y hemos prestado esta colaboración a otros países en otros momentos".
Asimismo, la secretaria de Estado resaltó la oferta realizada por la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), para recibir y rehabilitar a los niños que resultaron con graves quemaduras en el incendio de Lima.
Recordó el trabajo conjunto que realiza Coaniquem y el Ministerio de Relaciones Exteriores desde 1998, a través del cual se permite que niños que han sufrido accidentes con fuego, de los diferentes países de América Latina, puedan recibir tratamiento en Chile.
Hasta la fecha Coaniquem ha atendido a 89 menores del extranjero, 42 provenientes de Argentina, ocho de Bolivia, nueve de Brasil, cinco de Ecuador, ocho de Paraguay, 16 de Perú y uno de Suiza.
