BEIRUT.- El grupo chiíta libanés Hizbulá (Partido de Dios) reiteró que mantendrá su "acoso a Israel" y no permitirá que EE.UU. logre "victorias políticas o de seguridad", después de que Washington renovara el viernes sus acusaciones de terrorismo contra este movimiento pro iraní.
"Hizbulá y su brazo armado Resistencia Islámica están movilizados y siempre preparados. No cesarán en sus operaciones a lo largo de la frontera e impedirán al enemigo (Israel) descansar", afirmó el representante del grupo en el sur del Líbano, Nabil Kauk, a quien cita hoy la prensa local.
La consejera de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Condolezza Rice, declaró el jueves a una cadena de televisión privada libanesa que el Gobierno de Beirut debe actuar contra Hizbulá como lo hacen otros países contra el terrorismo: congelando sus activos y prohibiendo su actividad.
Kauk, que participó en un congreso de ulemas (expertos en ley islámica) celebrado en Beirut, subrayó que Hizbulá continuará la lucha contra el Ejército israelí hasta liberar las controvertidas granjas de Cheba, un estratégico enclave que Israel ocupa desde hace más de 34 años en su frontera con Siria y el Líbano.
Beirut reclama su soberanía sobre la zona, pero Tel Aviv asegura que es territorio sirio conquistado, por lo que su estatus debe ser negociado con Damasco.
"El Líbano, que hizo fracasar las acciones de Estados Unidos en la zona antes de humillar a Israel, no permitirá que los norteamericanos adquieran esta tierra para provecho del enemigo", apostilló Kauk.
Washington acusa a Hizbulá, que lideró la resistencia contra la ocupación israelí, de los atentados suicidas contra objetivos norteamericanos y los secuestros de ciudadanos extranjeros sucedidos en la década de los ochenta en el Líbano.
El Ejército israelí se retiró del sur libanés en mayo de 2000, tras más de 22 años de ocupación.
El ministro libanés de Asuntos Exteriores, Mahmud Hammud, rechazó el jueves las acusaciones de EE.UU., que también vincularon a Hizbulá con el apresamiento por parte de Israel la semana pasada de un barco con armas, el "Karine A", supuestamente destinado a la Autoridad Nacional Palestina (ANP).