JERUSALEN.- Israel lanzará una ofensiva diplomática contra Irán, supuesto aliado de Yasser Arafat, en tanto Ariel Sharon prepara un debate para un posible “cambio de estrategia” respecto de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en Cisjordania y Gaza.
La campaña del ministro de Asuntos Exteriores, Shimon Peres, quien considera a Irán “un peligro para Israel y para la estabilidad mundial”, y la noticia acerca del debate estratégico promovido por ministros de la derecha en el Gobierno de Sharon, coincidieron hoy con la muerte de un dirigente del brazo armado de Al Fatah, Raed al-Karni, en un atentado que fuentes palestinas enmarcan en la política israelí de “asesinatos selectivos”.
Estas dos iniciativas hacen prever que el proceso de paz entre Israel y los palestinos, estancado desde hace un año, siga bloqueado mientras se renueva la espiral de violencia pasadas tres semanas de una calma casi total tras la orden de Arafat a las facciones palestinas, del pasado 16 de diciembre, de cesar sus operaciones armadas.
El debate en el Gabinete de seguridad se celebrará en varias sesiones, y comenzará el próximo miércoles, se informó.
Por este motivo, y hasta tanto se conozcan las decisiones oficiales, el Gobierno de los Estados Unidos aplazó el regreso a esta zona del general en retiro Anthony Zinni -mediador entre la ANP e Israel para un alto al fuego- quien debía volver este viernes 18.
El posible “cambio de estrategia” es exigido por ministros de la derecha en la coalición de Sharon. Entre otras de las propuestas que ha de considerar el Gobierno se halla la del ministro de Hacienda, Silván Shalom, quien aboga por “la expulsión” de Arafat.
El Primer Ministro israelí prohibió todos los contactos con representantes de la ANP con motivo del contrabando de armas de Irán capturado el pasado día 3 por comandos navales de Israel a bordo del carguero Karin A, y consignado, según las autoridades militares, al Gobierno palestino con pleno conocimiento de su presidente Arafat.
Dos comandos palestinos del Movimiento de la Resistencia Islámica mataron la semana anterior a cuatro soldados de Israel, que respondió con la destrucción en Gaza de decenas de viviendas en un campo palestino de refugiados.
El vespertino independiente Iediot Ajronot afirma hoy que los contactos de Arafat con la República Islámica de Irán -a la que en varias ocasiones criticó duramente por respaldar a sus opositores de HAMAS y la Yihad Islámica- datan de abril del año pasado.
Añade que el objetivo del presidente palestino, desde la Conferencia de Madrid (1991) empeñado en una batalla diplomática para la creación de un Estado independiente en Cisjordania y Gaza, junto a Israel, era “conseguir capacidad estratégica y medios de combate para una lucha prolongada” a fin de materializar esa aspiración.
Arafat sólo logró en la mesa de negociaciones, y tras dos sangrientos levantamientos (intifada), un régimen de autonomía limitada en esos territorios que Israel conquistó en la guerra de 1967 y un 60 por ciento de los que siguen bajo su ocupación, lo que impide a los palestinos ejercer su derecho a la autodeterminación.
Por su lado, Irán, que no es un país árabe y aspira a la hegemonía en Oriente Medio y en el Golfo Pérsico, está interesado en expandir las actividades del Partido de Dios (Hizbulá) de Líbano en Gaza y Cisjordania, junto con el Movimiento de la Resistencia Islámica y la Yihad islámica, que repudian las negociaciones de paz con Israel.
“¿Irán es mi aliado?”, preguntó asombrado Arafat ayer domingo a la prensa en su confinamiento de la ciudad cisjordana de Ramala ante las afirmaciones de personalidades políticas y militares de Israel.
La captura de las armas a bordo del Karine A se convirtió en una caja de Pandora política y estratégica para Sharon, respaldado por Estados Unidos en sus acusaciones sobre la supuesta complicidad de la ANP en ese contrabando. Arafat, que se desvinculó, ordenó una investigación presionado por Washington y la Unión Europea (UE).
La ANP, igual que Irán, niega la presunta “alianza”, que según el diario inglés Sunday Telegraph comenzó a tejerse en una reunión entre representantes de las dos partes, celebrada en Moscú en abril del año pasado, dos meses después de llegar Sharon al poder.