BUENOS AIRES.- El presidente del Banco Central argentino, Roque Maccarone, renunció a su cargo el jueves y el vicepresidente, Mario Blejer, quedó al frente de la entidad, dijo un portavoz del órgano regulador.
"Confirmado, se la aceptaron (la renuncia) y queda (Mario) Blejer nombrado como presidente", dijo el portavoz del banco.
Maccarone sufría presiones políticas para abandonar su puesto justo cuando el gobierno impulsa un proyecto de ley para modificar la carta orgánica del instituto emisor y transformarlo en prestamista de última instancia del sistema bancario y habilitarlo a emitir moneda.
Además, recientes diferencias entre Maccarone y el Ministerio de Economía -que quedaron manifiestas en una confusa corrección de una norma emitida por el banco- hacían prever el fin de la gestión de Maccarone.
El Banco Central había informado que las deudas bancarias superiores a 100.000 dólares serían convertidas a la moneda local según el cambio libre del dólar, que oscila en los dos pesos.
El anuncio provocó una tormenta de protestas de los deudores y la aclaración gubernamental de que la conversión se haría al precio oficial del dólar, de 1,40 pesos, usado en transacciones del comercio exterior.
Sucesor
El funcionario reemplazó a mediados de 2001 a Pedro Pou, que fue despedido por el gobierno del ex Presidente Fernando de la Rúa por diferencias acerca de la política monetaria que debía desarrollar el Banco Central.
Blejer, quien ahora queda a cargo de la entidad días después de que el gobierno anunciara una devaluación de la moneda local, trabajó durante 30 años en el Fondo Monetario Internacional.
"Es el hombre indicado para el gobierno, lo que más deseaban era hacer ese arreglo, que el recambio sea ordenado y en esa dirección", dijo un portavoz del gobierno.