BEIJING.- El Presidente egipcio, Hosni Mubarak, se entrevistó hoy, miércoles, con el Jefe de Estado chino, Jiang Zemin, para tratar la grave situación en Medio Oriente e intentar salvar el proceso de paz palestino-israelí, que pasa por uno de sus momentos más difíciles.
“La situación en los territorios ocupados ha empeorado. La muerte de ciudadanos y la destrucción de casas no va a resolver ningún problema, es necesario que los dos lados respeten un alto el fuego y entablen negociaciones para prevenir un mayor deterioro”, dijo Mubarak a la agencia china Xinhua.
Mubarak, que llegó hoy a la capital china, donde comenzó una visita oficial a este país de tres días, fue recibido por Jiang Zemin en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín, lugar donde continúan las conversaciones entre ambos mandatarios.
El Presidente egipcio ya habló del conflicto palestino-israelí con su colega chino en una reunión celebrada en la ciudad portuaria de Alejandría en abril de 2000, en la que Jiang Zemin defendió el principio de “paz por territorios” establecido en la Conferencia de Madrid.
China y Egipto tienen unas excelentes relaciones diplomáticas y políticas, al tiempo que el Gobierno de Pekín no oculta sus simpatías por el Presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yaser Arafat, cuya figura es exaltada por las autoridades comunistas chinas con el mismo entusiasmo que la del Che Guevara.
Mubarak intentará que China, uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, tenga una presencia más activa en el conflicto palestino-israelí, al tiempo que estrechará aún más sus lazos con una de las potencias emergentes del siglo XXI.
Esta es la sexta visita oficial de Mubarak a China. El político egipcio vino a este país por primera vez como vicePresidente en 1976, época en la que se entrevistó con el entonces máximo dirigente chino, Mao Zedong, quien se mostró muy cercano a la historia del país del Nilo.
